Los líderes financieros del Grupo de los Veinte (G20) acordaron realizar una normalización bien calibrada, planeada y comunicada de la política monetaria para minimizar los efectos del aumento de las tasas de interés por parte de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed).

El consenso fue alcanzado durante el segundo día de la reunión de ministros de Finanzas y gobernadores de bancos centrales del G20 en Yakarta, con Indonesia como país anfitrión.

El gobernador del Banco de Indonesia, Perry Warjiyo, sostuvo que los países desarrollados deben garantizar que la política de normalización sólo tenga efectos mínimos para el mercado financiero mundial y que no implique ningún efecto indirecto para los países en desarrollo.

"Esto es algo importante que se tiene que hacer con urgencia para que la economía mundial pueda regresar al crecimiento a largo plazo y para que la cicatriz causada por la pandemia de Covid-19 pueda sanar más rápido", indicó Warjiyo.

La Reserva Federal señaló recientemente que el Banco Central tendría que elevar las tasas de interés de forma "más agresiva" y que espera "cuatro, quizá cinco alzas" este año, lo que se espera que repercuta en la condición de la deuda o en la estabilidad financiera de otros países, especialmente de economías emergentes.

El Banco Central de Indonesia también se ha movilizado para frenar la inflación, incluso a través de la promoción del uso de la divisa local en comercio e inversión transfronterizos, en un esfuerzo por reducir la dependencia del dólar estadounidense.

Warjiyo manifestó que en la reunión de ministros de Finanzas y gobernadores de bancos centrales también se discutieron asuntos más amplios relacionados con el sector financiero mundial, los riesgos en la cadena global de suministro y asuntos energéticos.