El nivel de reservas del Banco Central se verá notoriamente reducido este viernes, ya que impactará el pago que la Argentina realizó esta semana al FMI, por U$S 366 millones.

Si se suma el vencimiento cancelado el viernes de la semana pasada, por U$S 731 millones, la autoridad monetaria habría perdido alrededor de U$S 1.100 millones.

Durante el primer día de febrero, el Gobierno dio la orden de abonar una cuota de intereses al Fondo Monetario, por el acuerdo que se firmó en 2018; por cuestiones operativas, recién este viernes el monto de ese pago se verá reflejado en las reservas.

Sucede que el primer día hábil de cada mes, el FMI determina cuál será el valor en dólares de los Derechos Especiales de Giro (DEG) que se tomará en consideración para que los países que mantienen programas con ese organismo, como la Argentina, hagan sus pagos.

En esta oportunidad, la Argentina le debía al Fondo Monetario poco más de 236 millones de DEGs.

Además de establecer esa conversión, el organismo determina la fecha en que se deberán efectuar los pagos: en ese caso, para la Argentina, el día fijado fue el viernes 4 de febrero.

Por ese motivo, las reservas disminuirán en el último día hábil de esta semana.

El "entendimiento" al que arribaron la Argentina y el FMI -que se anunció hace una semana- tiene como uno de sus puntos centrales la acumulación de reservas: el objetivo es que durante este año, crezcan en unos U$S 5.000 millones.

Para 2023 y 2024, por el momento, no hay objetivos planteados respecto a este punto, como sí los hay para el déficit primario y el financiamiento monetario desde el Banco Central.

Hasta el jueves, las reservas internacionales se ubicaban en U$S37.566 millones, en los niveles más bajos de los últimos cinco años.

En lo que va del mes, el saldo de la intervención de la autoridad monetaria en el mercado de cambios es vendedor, por U$S45 millones; enero había cerrado con ventas por U$S130
millones.

El ministro de economía, Martín Guzmán, explicó recientemente que todos los pagos que se efectuaron en los últimos meses al FMI serán reintegrados con los nuevos desembolsos del programa.

Esos desembolsos serán trimestrales, a cuenta de revisiones periódicas del Programa de Facilidades Extendidas.

En marzo, opera un vencimiento de capital por u$S2900 millones, pero para ese entonces el Gobierno espera tener cerrado el acuerdo de refinanciación del préstamo de 2018.