Las reservas internacionales del Banco Central podrían alcanzar mañana un volumen de 40.000 millones de dólares, nivel que no registraban desde fines de octubre, en medio de una corrida cambiaria.

Según información oficial de la autoridad monetaria, las reservas se ubicaron este lunes en 39.923 millones de dólares, con lo que solo en abril acumulan una suba de 330 millones.

En el primer día hábil del año -4 de enero-, los fondos atesorados en el Central habían llegado a 39.501 millones de dólares, por lo que en comparación con el cierre de este lunes crecieron 422 millones.

El 27 de octubre de 2020, el día en que el dólar blue llegó al récord de 195 pesos, las reservas habían tocado un nivel de 40.140 millones de dólares.

A partir de ese momento empezaron a bajar de manera preocupante, hasta llegar a un piso de 38.619 millones de dólares el primero de diciembre de ese mismo año. 

Si bien en el año, las reservas suben 422 millones de dólares, las compras producto de diarias intervenciones del Central llegaron a 2.900 millones.

Solo en el tercer mes del año, la autoridad monetaria tuvo un saldo positivo de unos 1.500 millones de dólares, el mayor en la presidencia de Alberto Fernández, según estimaciones de operadores financieros, pero el balance provisorio de las reservas internacionales marca una mejora de sólo 79 millones.

Fuentes del mercado señalaron que la falta de correspondencia entre las compras de dólares y la evolución de las reservas obedece a la estrategia del Banco Central de operar en la plaza con la venta de títulos públicos con el propósito de controlar la cotización del dólar en los segmentos de contado con liquidación y del Bolsa o MEP.

Desde diciembre del año pasado, la posición de la autoridad monetaria pasó a ser netamente compradora, luego de varios meses con saldos negativos en un contexto que generaba preocupación en el mercado financiero y el propio gabinete económico, con una pérdida de reservas internacionales de 4.734 millones de dólares.