El Uso de Dinero Electrónico (UDE) tuvo en 2020 el mayor crecimiento anual desde que está en vigencia, con incrementos que llegaron al 7.569% en el caso de la extracción sin tarjeta, una de las modalidades más empleadas a partir de la irrupción de la pandemia de coronavirus.

El aumento del UDE obedeció en primer término a las modificaciones a las que obligó el aislamiento social, preventivo y obligatorio a partir del 20 de marzo, con restricciones a la movilidad que impulsaron una suba en las operaciones comerciales online, pero también a una mayor inclusión financiera de sectores de la población que no estaban bancarizados y a medidas de prevención sanitaria que restringieron la manipulación de billetes físicos.

Al respecto, el último informe de la Red Link destacó que si bien hasta febrero del año pasado las transacciones electrónicas mostraban un crecimiento sostenido, a partir del inicio de la cuarentena “se registraron numerosos récords en el Uso del Dinero Electrónico, que dejaron un punto de partida muy alto para consolidar el avance en 2021, en particular en lo que respecta a la utilización y desarrollo de aplicaciones para los canales móviles”.

El reporte destaca, además del aumento de las operaciones sin tarjeta, los récords en cantidad de usuarios en general, las transacciones, el home banking y el mobile banking.

Las operaciones sin tarjeta a través de punto efectivo alcanzaron su mayor nivel en julio, con más de 2 millones de órdenes y en los doce meses superaron 8,8 millones de transacciones, un 7.569% más que en 2019.

Más de la mitad del total de esas operaciones (el 53,58%) tuvieron lugar en la provincia de Buenos Aires, a la que siguieron en orden decreciente Santa Fe (11,94%), Ciudad de Buenos Aires (6,39%), Córdoba (5,78%) y Entre Ríos (4,79%).

La cantidad de tarjetas de débito bancario en circulación pasó de 27 millones a fines de 2019 a un máximo histórico de 31,7 millones, con un aumento del 17,7%.

Con la excepción de las recargas de transporte (por las limitaciones al uso de colectivos, subtes y trenes) todos los demás rubros crecieron. Las órdenes de extracción, débito inmediato, e-commerce y transferencias inmediatas tuvieron una suba del 85,1% respecto del cierre de 2019 y 58,7% desde el inicio de la crisis sanitaria. 

Las transacciones por home banking cerraron el año con un aumento del 20,9%, con el récord de 241,4 millones de transacciones registrado en julio, con récords en consultas de saldos (3.959.585), consulta de movimientos (1.444.142), y las transferencias (1.002.460). Por el contrario, acusó caída la consulta de vencimientos (1.241.774).

En el caso de las operaciones a través del teléfono celular, hubo un incremento del 33,1% en la cantidad de usuarios y del 32,8% en el número de operaciones.

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