Las condiciones financieras de la Argentina lograron el mayor incremento en ocho meses
El Índice de Condiciones Financieras tuvo el mes pasado una mejora de 21.1 puntos para ubicarse en -39.9, el mejor valor desde julio de 2019.
Las condiciones financieras de la Argentina lograron en abril el mayor incremento de los últimos ocho meses, y la economía empieza así "a sentir el viento de cola", de acuerdo con un informe difundido hoy por el Instituto Argentino de Ejecutivos de Finanzas (IAEF).
El Índice de Condiciones Financieras (ICF) que elabora esa entidad junto a la consultora Econviews tuvo el mes pasado una mejora de 21.1 puntos para ubicarse en -39.9, el mejor valor desde julio de 2019 y un crecimiento de más de 200 puntos desde su mínimo en abril del año pasado.
Según el reporte, el subíndice de condiciones locales subió por sexto mes consecutivo y se ubicó en el mejor registro desde las elecciones primarias de agosto 2019, pero tuvo su trigésimo segundo mes consecutivo en terreno negativo. Desde octubre último, remontó 25.7 puntos, entre otros factores por el acortamiento de la brecha cambiaria. El componente argentino del ICF sufrió la crisis financiera local desatada con fuerza en la segunda mitad de 2018, los efectos del resultado de las elecciones primarias y luego la pandemia, evaluó el IAEF.
Entre los componentes de las condiciones locales se destacaron la liquidez bancaria y la baja de la inflación núcleo. Pero el Merval en pesos constantes y el riesgo país fueron para atrás e impidieron una mejora más robusta del índice local, indicó el trabajo. Tampoco ayudó el componente definido como "riesgo de legislación" ya que aumentó el spread entre los rendimientos de los bonos de ley argentina versus ley extranjera.
Por su parte, el subíndice de condiciones externas mejoró 156 puntos desde su mínimo de hace un año, coincidente con el punto más álgido de la pandemia: actualmente tiene 9 de los 10 componentes en zona de confort. En este caso, las condiciones externas estuvieron ayudadas por una baja en la volatilidad de las acciones norteamericanas, pero también en mercados emergentes.
En este marco, el IAEF puntualizó que la economía argentina "siempre creció en forma sostenida cuando las condiciones financieras se mantuvieron en zona de confort durante un lapso prolongado" Según la entidad empresaria, 2020 "no fue la excepción: con viento de frente internacional en buena parte del año y condiciones negativas locales por todo el año, el PBI cayó 9.91%".
"En 2021 el rebote del piso está prácticamente asegurado dado el arrastre estadístico, pero el viento de cola va a ayudar", añadió. Y señaló además que si bien la Argentina no puede aprovechar esa bonanza porque no tiene abierto el mercado de capitales, los precios de las materias primas proveen mayor volumen de exportaciones y recursos fiscales.
"De todas maneras, fue interesante que en los últimos días hubo una compañía argentina que consiguió colocar deuda bajo ley extranjera, la primera emisión desde 2019. Posiblemente el viento de cola sea uno de los factores. En la medida que este viento favorable continúe, se puede pensar en mejores escenarios para el 2022", concluyó el informe.