El ex ministro de Hacienda Hernán Lacunza volvió a criticar las restricciones que viene imponiendo el gobierno a la compra de dólares desde que asumió la nueva gestión, aunque el inicio del "cepo" comenzó con la administración de Cambiemos.

“Tenemos que tener presente que todo cepo es una anormalidad. Puede ser un recurso transitorio para una situación de liquidez temporal. No podemos vivir con cepo cuatro años como tuvimos en 2011 a 2015 o ahora hace dos años que lo tenemos”, dijo Lacunza en declaraciones radiales.

El ex funcionario agregó que el cepo “puede ser un torniquete mientras dura una hemorragia transitoria, mientras tanto tenemos que buscar el virus que está provocando esa hemorragia, sino terminamos en una trombosis como estamos hoy" pero advirtió que "no va a ser la solución”.

Lacunza consideró que el gobierno debería haber podido relajar los controles este año, aprovechando el mayor ingreso de divisas, como producto del mejor precios de los productos que exporta el país. “En tanto y en cuanto no se resuelva el problema de que se incentive más ingreso de divisas que el egreso, por importación, por viajes, por pago de deuda, por lo que fuera, vamos a estar en una especie de pantano y con la paradoja de que además tenemos precio casi récord de nuestros productos exportables. con lo cual, en este año tendríamos que haber podido relajar el cepo, no de apretarlo más". 

Al respecto, el ex titular del Palacio de Hacienda dijo que "nos estamos metiendo cada vez más en un laberinto".

En tal sentido, el ex ministro rechazó los planteos teóricos de los economistas heterodoxos, quienes sostienen la hipótesis de que los dólares que genera el comercio exterior argentino no son suficientes para financiar la expansión de las industria, presionando sobre el la cotización.

Esa llamada restricción externa de que falten dólares no es un mal idiosincrático argentino. Hay que ser competitivos, hay que tener costos alineados con el mundo y en todo los ámbitos regulatorios, impositivos, logísticos, laborales, sino es querer vivir más allá de nuestras posibilidades o de nuestra competitividad”, sotuvo Lacunza.