La situación fiscal de enero mostró una mejora que se plasmó en el nivel más cercano al equilibrio de por lo menos los últimos diez años, con ingresos totales de $605.671 millones y gastos de $608.791 millones.

El Índice de Equilibrio Fiscal que mide el Centro de Estudios de la Nueva Economía (CENE) de la Universidad de Belgrano registró en enero una mejora del 67,1% respecto del nivel que había verificado en diciembre del año pasado y del 22,4% con relación al de igual mes del 2020.

“Es una buena noticia para las negociaciones en curso con el FMI, indicando una menor dependencia del Tesoro del financiamiento por parte del Banco Central”, señaló al respecto Víctor Beker, director del Centro de Estudios de la Nueva Economía (CENE) de la Universidad de Belgrano.

Para Beker, a su vez ex director del INDEC, “el desempeño fiscal es atribuible a un notable incremento en los ingresos, motorizados por los derechos de exportación, al reactivarse los embarques tras las medidas de fuerza en zonas portuarias registradas en diciembre”.

Pero además de la suba de los ingresos hubo también “un descenso de los gastos fiscales, tras el aumento estacional de diciembre, afectado por el pago del medio aguinaldo”.

La combinación de ambos factores se tradujo en el primer superávit primario en once meses y un resultado financiero que fue levemente deficitario según la metodología oficial y superavitario si se consideran los gastos devengados.

La Universidad de Belgrano elabora periódicamente el Índice de Equilibrio Fiscal (IEF), que se calcula como el cociente entre los gastos y los ingresos totales.

El valor 100 indica una situación equilibrada, por encima de dicho valor denota superávit, y por debajo, déficit, precisamente la condición que presentan las cuentas públicas ininterrumpidamente desde hace más de una década.

Más allá de que la situación fiscal de enero siguió siendo deficitaria, el nivel de 99,50% es el mayor de los últimos diez años.

El desempeño del primer mes de 2021 mostró una mejora interanual del 22,4% respecto de enero de 2020 y del 67,1% en comparación con diciembre, un mes en el que por razones estacionales -aguinaldos de empleados estatales y de jubilados y pensionados- las condiciones fiscales suelen ser las peores en cada año.