La recaudación de septiembre y octubre anticiparía el "principio del fin" de la recesión
Los aumentos de los ingresos tributarios por arriba de la inflación por dos meses consecutivos se reflejarían en una mejora del EMAE
La mejora en la recaudación de septiembre y octubre, que por primera vez en el año fue superior a la inflación, podría representar un anticipo de una evolución positiva de la actividad económica, ya que ambas variables guardan una relación directa que puede seguirse en los últimos meses.
Al respecto, la Oficina de Presupuesto destacó "una elevada correspondencia entre la dinámica de la recaudación ajustada por inflación y la del nivel de actividad" y en ese sentido rescató el incremento real de los ingresos tributarios del 5,6% en septiembre y del 6% en octubre.
Si bien en ambos casos parte del aumento no obedeció exclusivamente a una recuperación de la economía sino a "alteraciones en el calendario de vencimientos impositivos" y a "la flexibilización del aislamiento social y la menor base de comparación" contra los mismos meses de 2019, esos atenuantes también fueron válidos en julio y agosto, en los que no hubo mejoras en términos reales.
El próximo 24 de noviembre el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) dará a conocer el Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE) correspondiente a septiembre, en tanto para los datos de octubre habrá que esperar hasta el 23 de diciembre.
Además del anticipo que podría significar el aumento de la recaudación en términos reales, otros datos aportados por el organismo estadístico van en el mismo sentido.
Al respecto, el Índice de Producción Industrial Manufacturero tuvo en septiembre la primera evolución interanual positiva en 2020, con una mejora del 3,4% respecto del mismo mes del año pasado, en tanto la actividad de la construcción, si bien tuvo una caída del 3,9%, mostró una desaceleración del retroceso, incluso con una mejora mensual del 3,9%.
De todas maneras, se considera que para establecer un pase de la recesión al crecimiento son necesarios dos trimestres consecutivos de mejoras interanuales, por lo que, en caso de concretarse la correlación con la evolución de la recaudación real, habrá que esperar hasta 2021 para corroborar el cambio de tendencia.