La caída del riesgo a los niveles más bajos de los últimos cinco años obedece especialmente a la certeza transmitida por el gobierno argentino de que cumplirá con los pagos de deuda del año próximo, según especialistas.

Los expertos destacan que, además de bajar el costo de vida, Javier Milei redujo a la mitad el índice elaborado por el JP Morgan, que superaba los 1.900 puntos en diciembre de 2023.

Subrayan, además, que el inicio de las medidas de ajuste del gasto público y la consolidación del equilibrio fiscal, logró que el indicador cayera paulatinamente. 

El viaje de Caputo y su equipo a Estados Unidos, y la confirmación de que se arribó a una negociación con bancos internacionales, terminó de despejar el escenario financiero.

También contribuyó el muy buen resultado del blanqueo de capitales y los desembolsos por unos US$ 8.800 millones que harán el Banco Mundial y el BID a lo largo del 2025.

Las reuniones de funcionarios argentinos con directivos del FMI contribuyeron a consolidar la sensación de que se llegará a un nuevo acuerdo con el organismo cuando haya una nueva administración instalad en la Casa Blanca.

El descenso del riesgo país representa un incremento de la confianza y analistas financieros hablan de una mejor expectativa del mercado sobre la posibilidad de cobrar sus bonos.

Según consigna un informe del economista Fernando Marull, el pago que debe afrontar el Gobierno en concepto del capital equivale a US$ 2.000 millones. 

El pago total (capital más intereses) es de US$ 3.500 millones, y los US$ 1.500 millones de intereses ya los compró el Tesoro y los mando a una cuenta en Nueva York.

En paralelo, el valor de los bonos soberanos de Argentina subió, ya que los Bonares trepan hasta un 2,1% en el exterior (AL29D), mientras que los Globales registran alzas del 2,55% (GD29D) durante el viernes.

También cayó bien en el mercado financieros que el Banco Central haya podido comprar ya unos US$ 1.100 millones en lo que va de octubre.

Según datos del Banco Central, desde que comenzó el blanqueo, la cantidad de dinero depositado en bancos creció un 26%.