La balanza comercial y la inflación podrían complicar la recuperación, según la Cámara de Comercio
La CAC advirtió sobre los condicionamientos de la caída del superávit en el intercambio y la aceleración de los precios al consumidor.
La incipiente recuperación de la actividad económica que muestran algunos indicadores podría verse truncada a raíz de la reducción del superávit comercial y la aceleración de la inflación, de acuerdo con el análisis de la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC).
La entidad destacó al respecto que la recuperación de la industria tuvo el efecto no deseado de un menor saldo favorable en la balanza comercial, en tanto implica una mayor importación de insumos para la producción, y eso complicaría la situación del Banco Central, cuyas reservas internacionales se encuentran en el nivel más bajo desde enero de 2017.
El próximo 24 de noviembre, el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) dará a conocer los datos de comercio exterior de octubre, con el antecedente del superávit de septiembre de US$ 584 millones, con una caída interanual del 66%.
"Si esta situación se repitiera en los próximos meses, la crisis que enfrenta el BCRA sin ingreso de divisas sería aún más complicada de soportar sin un salto del tipo de cambio, aun cuando decida restringir totalmente al público el acceso al mercado de divisas", advirtió la CAC en su último informe mensual.
Al respecto, la entidad señaló que "a la falta de dólares que enfrenta la autoridad monetaria, la mejora de la industria manufacturera implicará un crecimiento de importaciones y por lo tanto mayor salida de divisas, lo cual agravaría más la situación actual en la cual el BCRA".
En ese sentido, el especialista en comercio exterior Marcelo Elizondo señaló en declaraciones radiales que "el superávit comercial que tenía la Argentina era insostenible en el tiempo, porque estaba basado en que se importaba muy poco".
Elizondo explicó que en promedio "las exportaciones están cayendo el 11% pero las importaciones el doble, el 22%", pero que "a medida que la economía tiende a recuperar el equilibrio, las importaciones tienden a recuperarse".
"La Argentina tiene que generar más divisas, porque para producir se necesita importar. Cuando se supere la pandemia vamos a volver a viajar al exterior y, además, las empresas internacionales necesitan enviar remesas a sus países de origen", indicó.
En su análisis, la CAC destacó las mejoras en determinados indicadores, entre los que pueden señalarse el IPI Manufacturero, la menor caída de la actividad de la construcción, el aumento de los despachos de cemento y una utilización de capacidad instalada de la industria que alcanzó en septiembre el máximo valor de 2020.
"No obstante, estas mejoras no significan que podamos hablar de un sendero de crecimiento sino, por el momento, solo de una recuperación de la difícil situación vivida entre abril y agosto con las medidas adoptadas por la cuarentena", sostuvo.
Pero la CAC puntualizó la continuidad de "los problemas estructurales del país" que periódicamente generan los denominados "cuellos de botella" en el sector externo.
Al respecto, remarcó que "el hecho de que la industria se haya recuperado en septiembre implicó que, en dicho mes, el superávit de balanza comercial se redujera drásticamente".
Por otra parte, indicó que además del superávit comercial "hay otra variable que lentamente ha comenzado a ajustar su comportamiento hacia arriba en los últimos meses: el IPC".
"Por el momento, muchos bienes o servicios se encuentran con precios contenidos, sea por Precios máximos o por tarifas fijas. El problema es que estos sectores insisten en ajustes para hacer sostenible su actividad lo cual termina impactando en la evolución del IPC, por ejemplo, la suba de combustibles o el alza de prepagas de salud o los posibles ajustes de tarifas energéticas que se esperan para enero o febrero 2021", planteó la entidad presidida por Jorge Di Fiori.
En ese contexto, la CAC indicó que "el Gobierno deberá trabajar en dar señales concretas que reduzcan la incertidumbre, indiquen qué camino piensan seguir en materia económica".
También resaltó "la importancia del sector privado con la intención de lograr cierto ingreso de capitales extranjeros que ayude a sostener temporalmente la difícil situación que atraviesa el BCRA con sus reservas, para que luego pueda ser consolidada la mejora con un incremento de exportaciones que permitan el ingreso genuino de divisas".
La CAC finalizó indicando que esa es la "única forma que tiene el país para reducir uno de sus grandes problemas históricos: el estrangulamiento del sector externo".