Por Antonio D'Eramo

Fue el ministro de economía de Eduardo Duhalde que puso el punto final a la convertibilidad y debió dominar los difíciles meses posteriores a la implosión de la economía argentina. Con sus acciones y los precios favorables de las materias primas en los mercados internacionales se cimentó el camino de la recuperación observada durante la presidencia de Néstor Kirchner. Alejado de los reportajes y de los avatares diarios de las finanzas nacionales, el ex diputado nacional y ex embajador ante la Unión Europea en Bruselas, se encuentra dedicado al Observatorio de la Economía Mundial que realiza la Escuela de Economía y Negocios de la Universidad de San Martín. Su preocupación principal no es opinar acerca de la coyuntura nacional sino de los trazos gruesos de la economía mundial. Un mundo capitalista estresado y jaqueado por la pandemia de Covid-19 que provocará grandes transformaciones y la inserción de la Argentina en esa terra incognita que será el mundo post pandemia.

En los últimos meses ofreció disertaciones virtuales ante la dirigencia ruralista de CRA (Confederaciones Rurales Argentinas), presentó un Boletín de su oficina de estudios académicos y se presentó, esta semana, ante los legisladores e invitados que integran el Círculo de Legisladores de la Nación. Con su acostumbrado bajo perfil dejó las siguientes definiciones.

"Este virus nos hizo notar que todos vivíamos en el mismo mundo globalizado. Se trata de una crisis simultánea e inédita: los gobiernos actuaron rápidamente y se acepta el déficit, el aumento de la deuda y la ayuda a la población mediante subsidios".

El diálogo se dirigió hacia el futuro del sistema capitalista, Remes Lenicov, se mostró cauteloso antes de ofrecer un pronóstico: "Nos encontramos frente a un cambio de paradigma: no se sabe adónde irá el mundo. Tendremos que discutir geopoder, política y sus instrumentos. Estamos entrando en años en los que el mundo se reordenará de otra manera para evitar el malestar de la población".

Uno de los hechos más notables ya registrados es el auge del trabajo a distancia, la utilización a gran escala de las tecnologías de la información que impactan sobre el modelo de producción y las fuerzas productivas, Remes Lenicov reflexionó: "nos hemos entrenado en pocos meses en el e-commerce, en las clases virtuales, en resolver cuestiones cotidianas con la tecnología y gracias a eso podemos superar la cuarentena. La reconversión de los trabajadores lleva años, por eso les va mejor a los más calificados: para los países es central la educación, para sobrellevar los cambios y crecer a futuro". Además ofreció datos de su Observatorio: "con la pandemia hubo un salto tecnológico importante. Entrenamiento en comercio electrónico, educación a distancia y el teletrabajo que cambió la modalidad de producción, empleo y transporte. En el 2000 las ventas por E-commerce en Estados Unidos eran del 1 %, en 2019 el 16 %, ahora representa el 25 %. Esto favorece a los trabajadores calificados. Los países que no avancen tecnológicamente y no tengan buena educación, tendrán muchas dificultades para crecer. Esta pandemia deja mucho temor por el futuro del empleo".

Este avance de la tecnología ha posibilitado que muchos filósofos, Giorgio Agamben en Italia es una de las voces que más ha denunciado el estado de excepción producto de la pandemia, miraran con desconfianza el avance sobre las libertades individuales de las poblaciones. Remes reflexiono que "pocas empresas concentran la mayoría de las informaciones de las personas y esto puede afectar la privacidad, la seguridad y el funcionamiento de la democracia por la manipulación de los datos. Hay que evitar la dictadura digital en cuanto a la propiedad de los datos porque el que tiene la información tiene el poder".

Para Remes Lenicov es posible que "el mundo post pandemia tenga más restricciones para la migración de personas, movimiento de bienes, capitales, servicios, mano de obra, tecnología y datos de información. Esta pandemia acelera el proceso de globalización donde va a ver menos crecimiento, guerras tarifarias y devaluaciones competitivas. El covid-19 ha afectado a toda la economía mundial con aumentos muy profundos del desempleo y sobre todo la pobreza. El problema para el futuro es la inflación que va a venir en aumento en países desarrollados que hoy tienen un 1.5 % se cree que para el 2022 podría llegar al 3.5 %. Ni hablar en países en vías de desarrollo que pueden llegar al 6 % anual".

El capítulo argentino

Sin ingresar en definiciones del día a día e insertando a la Argentina entre las naciones de la región sudamericana Remes Lenicov está convencido de la necesidad de acuerdos nacionales. Acaso una coincidencia con el planteo de la vicepresidenta Cristina Fernández en convocar a un diálogo que por el momento la administración del Presidente Alberto Fernández prefiere obviar. En breves declaraciones periodísticas y ante la cúpula de la CRA Remes sintetizó "La Argentina no puede quedar rezagada, debe decidir, de manera interna, cuál es su propio modelo de desarrollo. Qué puede producir, cómo puede hacerlo, cómo será comercializado y cómo serán distribuidos los excedentes producto de las ventas al mundo. Esto exige una discusión abierta entre todos los sectores, porque es una decisión estratégica que, para que funcione, todos los gobiernos deberían seguir, más allá de las diferencias políticas. La economía tiene leyes, en todas estas largas décadas el líder marca un rumbo, pensando que con voluntad política va a dirigir a la economía y no es así, la economía tiene sus leyes, de lo contrario, no habría pobres. Por ello es necesario acordar un plan económico. Debe haber un plan fortalecido con acuerdos". Y, ofreció el ejemplo histórico del proceso de sustitución de importaciones por el modelo exportador de materias primas. "Desde hace más de cuarenta años que no se ha podido definir un modelo de desarrollo económico compartido por todos y eso es insostenible". ¿Exhibe fortaleza el FMI, el Banco Mundial y el BID para servir de locomotora que encarrile las consecuencias económicas no deseadas de esta pandemia y posterior cuarentena?

El ex ministro de Duhalde aseguró "La pandemia ha puesto en evidencia la crisis del multilateralismo que debe equiparar a todos pero que hoy no lo expresa. El Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional no cuentan con los fondos para atender una pandemia o crisis global. La Organización Mundial de la Salud no puedo ejercer liderazgo, no estaba preparada y muchos menos le correspondía enfrentarse con países como por ejemplo EE.UU. Tampoco avanza en la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE), las discusiones para controlar los paraísos fiscales, más aún cuando se necesitan dinero para atemperar la crisis". Agregó "sigue habiendo alrededor de 50 territorios entre listas negras y grises como EE.UU, Reino Unido, Luxemburgo, Suiza, Países Bajos, Caribe, Hong Kong, Macao, Singapur. Se calcula que hay entre 20 y 30 billones de dólares escondido en estos paraísos fiscales".

El cierre de las disertaciones no fueron optimistas, Remes Lenicov, se mostró preocupado por la pobreza, los salarios, la distribución y la concentración. "Por la pandemia la pobreza aumentará en 150 millones de personas. En los últimos 25 años el 1 % más rico de la población percibió más ingresos que el 50 % más pobre. El 1 % más rico tiene el 35 % mientras que el 75% de menor riqueza, tiene el 10 % del total. La concentración está en 10 empresas que en el año 2015 facturaron el equivalente a 180 países".