¿Llegará el cambio al sector energético? o ¿tendremos un verano hiper caluroso sin luz en las grandes ciudades como sucede desde la caída de la Convertibilidad? Cortes de suministro a industrias, a hogares, en barrios de la CABA repletos de edificios. 

Ascensores que no funcionan, escaso suministro de agua potable en veranos tórridos, son todos escenarios conocidos que podrían volver a ocurrir durante el segundo verano mileista si el Presidente no toma nota, de manera urgente, de los desajustes que se produjeron en el sector por la desregulación en la importación de combustibles y las internas que estallaron, de manera increíble, entre funcionarios y asesores que, en definitiva responden a las máximas autoridades del Palacio de Hacienda.

Lo primero que hay que señalar es el replanteo que están llevando adelante los ejecutivos de las compañías generadoras de electricidad con advertencias de analistas del sector cercanos a ellas acerca de un inminente colapso de la producción energética.

El sistema eléctrico parece tener un idioma propio pero lo fundamental es distinguir a las compañías generadoras de energía, por ejemplo, una planta de energía hidroeléctrica, de la de transporte, que se ocupan de las líneas de alta tensión y del traspaso de la energía eléctrica desde la red de transporte hasta los puntos de consumo, proceso denominado distribución y compuesto por empresas como Edesur, Edenor o Edelap; entre otras.

Todas las empresas del sector operan en el Mercado Eléctrico Mayorista (MEM) que está gestionado por CAMMESA  (“Compañía Administradora del Mercado Eléctrico Mayorista”), una sociedad con participación del Estado.

Es en Cammesa donde la desregulación libertaria ha provocado enormes internas y replanteos. 

La idea central de Javier Milei es la de eliminar la intermediación de Cammesa, que recibe la producción de la electricidad y luego la comercializa a las distribuidoras. Además de terminar con la intermediación de los contratos por la adquisición de combustibles para generar electricidad.

Este cambio de reglas comenzó con la Resolución 150/24 que va en contra de toda intermediación de Cammesa en el sistema. Alli, se señala que "el Estado tiene que hacer las reglas y controlar que estas se cumplan y son las empresas privadas las que tienen que interactuar entre sí. Comprando y vendiendo energía, comprando combustible, la logística de esos combustibles. El objetivo es que todo consumidor pueda elegir las mejores condiciones que le convengan".

Pues bien, se acaban las instrucciones regulatorias para Cammesa pero el sector de generación de energía no tiene demasiados indicios de como va a funcionar, correctamente, la totalidad del sistema si todos los costos recaerán sobre sus espaldas. Y, las malas noticias se trasladarán sin dudas hacia los consumidores finales con incrementos en sus boletas de luz.

Con esta resolución, el secretario de Energía, Eduardo Rodríguez Chirillo, elimina los fondeos para importar energía pero no terminó con el monopolio que posee CAMMESA, por una resolución anterior, la Nª 95 que no fue derogada, por la que la empresa en cuestión tiene la misión de la importación de combustible para poner en marcha la generación de energía

Este descuido en el proceso desregulador del sector eléctrico llevó a que el vice presidente de Cammesa, Mario Cairella, que reporta directamente al ministro de Economía, Luis Caputo, le pida a su superior directo y secretario de Energía, Eduardo Rodriguez Chirillo, que lo instruya, pero, por escrito, en lo que respecta a la importación de combustibles y su respectivo fondeo. 

Un enfrentamiento gigantesco entre funcionarios de un mismo gobierno que se potenció cuando Chirillo comenzó por quitarle funciones a la gerencia de contratos de Cammesa y el despido de su gerente Luciano Condó a comienzos de marzo. Chirillo buscaba eliminar definitivamente el rol de la compañía Cammesa como contrante de nuevos proyectos de generación y quitarla como intermediaria en la compra de combustible para las centrales termoeléctricas.

Sin embargo, uno de sus funcionarios leales en Cammesa, el gerente general, Jorge Garavaglia, propuso en una reunión de directorio, la incorporación de la abogada sanjuanina, Andrea Polizzotto, de pasado reciente en la secretaría de Energía del gobierno del Frente de Todos, para hacercse cargo de los contratos remanentes de la oficina que dejo vacante Luciano Condó.

Señales que los ejecutivos de empresas del sector no saben como interpretar pero que posibilitaron una denuncia grave por corrupción de uno de los asesores de Chirillo contra el vice de Cammesa, Mario Cairella.

Para Fernando Luis Olaizola, un colaborador de Chirillo, las críticas sobre su jefe provienen de funcionarios que se enriquecieron haciendo de intermediarios entre Cammesa y las empresas, según dejo trascender en una opinión publicada en el medio especializado en la materia, econojournal.com.ar 

Olaizola escribió, "Cómo les cuesta a algunos «soltar la teta»… se sabe que en los últimos 20 años (desde 2003) tanto en la «Gerencia de Contratos» como la «Gerencia de Combustibles» de Cammesa se «perdieron en el camino» algunos miles de millones de dólares que fueron a las manos porosas de algunos funcionarios y sus amigos.!! Chirillo sólo les está «cortando el business» y obvio todos los viejos enquistados saltan como leche hervida, sobre todo Ruichoto, que redactó este artículo y se lo pasó al VP Cairella que vino a defender la suya, todos funcionarios millonarios que siguen operando en la prensa para seguir robando.! Pronto desfilaran por Comodoro Py.! Viva la libertad.!

En su prédica y denuncia libertaria, Olaizola describe con el mote de “Ruichoto”, al funcionario Jorge Ruisoto, director de Auditorías de Cammesa. 

El escándalo interno no ha hecho más que comenzar con cruces que amenazan con capítulos por escribirse en la Justicia federal luego del receso invernal. Lo cierto es que para los atribulados argentinos, al revés de la amenaza invernal que se cernía sobre las tierras imaginarias de Games Of Thrones, el verano está llegando.