Se viven días de mucha preocupación entre los trabajadores de la AFIP. 

La agencia recaudadora nacional está inmersa en cambios que provienen desde la conducción de Florencia Misrahi y que realiza de manera operativa el subdirector de recursos humanos, Facundo Rocha, que trabajó durante la gestión macrista de Leandro Cuccioli y que ganó enorme influencia en los últimos tiempos dentro de la oficina estatal al poder hacer y deshacer en materia de traslados, contrataciones y retiros.

A esta incertidumbre que tienen los empleados jerárquicos de la AFIP, aquellos que son profesionales, contadores, abogados, y que tienen importantes funciones fiscalizadoras en todo el territorio nacional, se suma la consternación e indignación por una noticia falsa que se publicó en varios medios, sin firma y que tiene “mucho olor a operación macrista”, según confió uno de los mas veteranos abogados que conoce a la AFIP de la A a la Z.

La indignación no habría escalado si el Presidente Javier Milei no hubiera retuiteado en su cuenta de X, un post, donde da cuenta del rebote de esta información y que provocó la incertidumbre generalizada entre los trabajadores de la AFIP que aseguran, “…es un hecho que en cualquier momento la motosierra pasará por acá, a pesar de ser los que debemos sostener la recaudación de un Estado Nacional exhausto y repleto de requerimientos de sus ciudadanos”.

SI bien la información publicada da cuenta de los sueldos que cobran los funcionarios “políticos”, aquellos que fueron nombrados por la administración de Javier Milei y que no son de carrera administrativa, como, por ejemplo, lo que ganó la titular del organismo en el mes de agosto, Florencia Misrahi, con un sueldo cercano a los $32.180.328 y los directores Eduardo Raúl Mallea (Aduanas), Gabriel Eduardo Ramírez (Impositiva) y Santiago Mozetic (Recursos de la Seguridad Social) que cobran más de $17.201.402, de un salario básico de ($1.323.635) al que se le suma la cuenta de jerarquización ($15.877.767).

Ahora bien, Mozetic tiene a su cargo cinco expedientes de especial interés para la Casa Rosada y que mantienen en vilo a dos ex presidentes, Cristina Kirchner y Mauricio Macri. 

Cinco expedientes muy pesados y uno de mucha actualidad social, deportiva y electoral. La que involucra al Grupo Indalo de Cristóbal López y Fabián de Souza; al Grupo Bael; OCA y lo que quedó de su proceso de quiebra; Ciccone Calcográfica y a la Asociación del Fútbol Argentino (AFA). 

En el ecosistema recaudador se encuentran aquellos profesionales que trabajan en la AFIP,  a las órdenes de los designados por la política de turno, que “…por lo general, cobran un salario bruto en promedio de tres millones de pesos, y no de 15 o 32 millones”, como señaló Julio Estévez (h) Secretario General Nacional de la Union del Personal Superior de la Administración Federal de Ingresos Públicos.

El dirigente gremial es abogado, trabaja desde hace varios años en el organismo y no conoce ningún afiliado a su gremio de jerárquicos que gane el dinero que se difundió en varios portales de actualidad como “…si fuera una noticia verdadera. Tememos que detrás se esconde una intención de ciertos sectores del gobierno por romper una agencia que funciona muy bien, aún con las restricciones económicas del país, y lamentamos que el Presidente Milei tome nota de estas mentiras y replique una información que es falsa. Indudablemente le están mintiendo”, señaló el sindicalista.

La piedra del escándalo parece estar en la denominada “cuenta de jerarquización” en la AFIP. Esta herramienta parece estar bajo la lupa de algunos funcionarios de Casa Rosada y algunos de ellos explican que constituye un sobresueldo jugoso para los jerárquicos.

La denominada Cuenta de Jerarquización es un instrumento común en los órganos recaudadores de diversos países y funciona como un estímulo y un premio profesional. Se trata de un porcentaje sobre la recaudación general que se divide entre todas los trabajadores del organismo y que se cobra por mes.

Ahora bien, aún incluyendo esta cuenta de jerarquización no se llega a los números escandalosos que se arrojaron en los medios para un funcionario de la administración pública. 

Según trascendió de la oficina de prensa del sindicato de jerárquicos de la AFIP, varios profesionales pondrán a disposición de la opinión pública sus recibos de sueldos para demostrar que las fake news, que se generaron en medios privados y se difundieron por redes sociales, son, en ocasiones un arma de doble filo, incluso para el Presidente Milei, que, “en esta ocasión, reposteó inexactitudes”.