El subdirector general de fiscalización de la AFIP, Julián Ruiz, aclaró hoy en la Cámara de Diputados que "en ningún caso", producto de la aplicación del impuesto a las Ganancias, el incremento de salarios vaya a generar una reducción en el sueldo neto de bolsillo.

"A veces se genera la confusión de que un peso más genera que el trabajador cobre menos, y esto no es así", dijo el funcionario en la introducción de su exposición en el plenario de las comisiones de Presupuesto y Legislación del Trabajo.

Con una serie de gráficos que compartió a modo de presentación con los legisladores que lo escuchaban de forma remota, Ruiz demostró que más allá de la progresividad de la norma, siempre y en todos los casos a mayor salario bruto al trabajador asalariado le corresponderá un mayor sueldo neto.

"El incremento de salarios nunca genera una disminución del salario neto", señaló, e incluso mostró en un gráfico que las horas extra que implicasen superar el piso de Ganancias tampoco redundarían en una caída del ingreso de bolsillo.

Ruiz indicó que "no hay discrecionalidad, sino una delegación legislativa para que el Poder Ejecutivo aplique una fórmula matemática" que garantice "que un peso más ganado no genere una disminución en el salario neto".

Aclaró que el Gobierno no apunta a modificar las escalas del 94 porque eso "no solo afectaría a los trabajadores en relación de dependencia, sino que afectaría también a aquel que tenga rentas pasivas".

La iniciativa del oficialismo plantea elevar a 150.000 pesos brutos el mínimo no imponible de Ganancias, además de eximir al aguinaldo del pago de este tributo.

Antes de la presentación de Ruiz tomaron la palabra tres tributaristas, los contadores Humberto Bertazza y Sergio Pantoja y el especialista en Derecho Tributario Horacio Corti.

Bertazza indicó que coincide con los objetivos expresados en la norma propuesta por el oficialismo pero dijo que tiene reparos con "el diseño que se ha utilizado para intentar
modificar la ley" ya que propende a "una desnaturalización del impuesto".

Puso como ejemplo el de un trabajador que gana 145.000 pesos, y que por ende no estará en un comienzo alcanzado por el mínimo no imponible pero que como producto de la inflación y las paritarias superaría ese piso a mediados de año, lo cual llevaría a pagar el impuesto en caso de que el promedio de los 12 meses del año de por encima de 150.000.

"Eso haría que la exención se pierda. Y se pierde desde el 1 de enero, porque es un impuesto de ejercicio donde no se admiten segmentaciones", planteó.

En ese sentido, evaluó que "el objetivo perseguido por el legislador no se alcanza porque los montos de actualización ya quedaron previstos para todo el año".

En este marco, propuso modificar las escalas, ya que actualmente se llega a la alícuota máxima del 35% "muy rápidamente".

A su turno, Pantoja coincidió con Juntos por el Cambio en cuanto a que el RIPTE "no es el índice adecuado" para actualizar el mínimo no imponible, y además propuso que este ajuste sea semestral y no anual como está previsto en el proyecto del oficialismo.

"Se debería utilizar una actualización de valores que refleje el incremento de los precios, como el IPC, teniendo en cuenta el impacto del proceso inflacionario para empleados
relación de dependencia", consideró.

También sugirió que se puedan incorporar como deducciones los gastos de educación, con un tope, en línea con lo que después plantearía el diputado de la UCR Emiliano Yacobitti.

En sintonía con Bertazza, la escala progresiva de Ganancias "se encuentra claramente aplanada, razón por la cual superando un importe muy poco significativo en términos de capacidad contributiva, la tasa del impuesto prácticamente se hace proporcional al 35%".

Por su parte, Corti se mostró más satisfecho con la reforma planteada por el oficialismo aunque coincidió en que "la escala está muy amesetada" y propuso ampliar las escalas.

Para compensar el costo fiscal que esto supondría, sugirió la posibilidad de aumentar la alícuota para los salarios más altos, dándole así mayor "progresividad" a la reforma de Ganancias.

Al momento de las intervenciones de diputados, Yacobitti marcó la contradicción que que la legislación actual admita deducciones por seguros de vida, que beneficia a los sectores de más altos ingresos, y no estén contempladas las deducciones por gastos en educación como por ejemplo compra de computadoras, clases particulares y gastos de conectividad.

Este viernes a las 15:00, el plenario de comisiones recibirá a referentes sindicales de la CGT, de la Corriente Federal de Trabajadores, del Frente Sindical (moyanismo), de la CTA de los Trabajadores y de la CTA Autónoma.