El presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA), Daniel Funes de Rioja, negó este sábado que la entidad esté en manos de una “línea dura” de confrontación con el gobierno, destacó el “buen diálogo” con funcionarios y relativizó la importancia de la ausencia de Alberto Fernández en el acto realizado el jueves por la central fabril.

Asimismo, intentó minimizar las diferencias dentro de la entidad expresadas por su ex presidente y actual titular del Banco de Inversión y Comercio Exterior (BICE), José Ignacio de Mendiguren, quien había desacreditado la pertenencia de Funes al empresariado industrial y asegurado que había sido designado al frente de la UIA por gestiones del CEO del Grupo Techint, Paolo Rocca.

“La UIA es muy plural, hay de todas las vertientes de todas las provincias de todas las identidades y por eso marcamos mucho la necesidad de diálogo federal”, remarcó Funes de Rioja en declaraciones radiales, luego de la celebración del Día de la Industria, en la que el presidente Alberto Fernández decidió no concurrir al encuentro de la UIA y prefirió encabezar un acto en el Chaco.

Si bien reconoció que “para la UIA hubiera sido un honor tener al Presidente” en el acto del 2 de septiembre, negó que su ausencia esté relacionada con supuestos enfrentamientos con el gobierno a partir del cambio de la conducción de la entidad en junio de este año.

"Si creen que la UIA está en manos de una línea dura, imposible de conversar con ella, es muy lejos de la realidad”, aseguró, al tiempo que rescató que “los funcionarios a quienes delegaron” la representación oficial en el acto “son muy relevantes para la industria porque son de diálogo permanente”, en referencia a los secretarios de Industria, Economía del Conocimiento y Gestión Comercial, Ariel Schale, y de Comercio Interior, Paula Español.

Problemas de agenda

En cuanto a las razones de la ausencia del primer mandatario, Funes planteo que no tenía “por qué evaluar si era una realidad o una excusa”, aunque confió en que se trató de “una realidad” surgida del hecho de que al Presidente “se le superpusieron problemas de agenda”.

Más allá del “diálogo, consenso y búsqueda de concertación”, el titular de la UIA no descartó que se expresen discrepancias “cuando tenemos problemas, como por ejemplo hoy con contenedores o buques que no llegan al puerto”.

Al ser consultado sobre la postura de Mendiguren sobre el rol de Paolo Rocca, de quien dijo que busca “gobernar a las entidades” a través de Techint, Funes admitió que “es un pensamiento que tiene” el titular del BICE, que “evidentemente no ve la realidad en el sentido de nuestros mecanismos de decisión interna”.

“Nosotros fuimos con una lista de unidad que fue votada por unanimidad y si se mira al interior de la lista y en el propio comité de presidencia, se va a ver que hay quienes tienen en su proyección política de su pensamiento industrial, y ni hablar de temas macroeconómicos, posiciones diferentes y son respetables”, acotó.

En ese sentido, reiteró su rechazo a quienes lo sindican como opositor al Gobierno: “por qué nos catalogan o me catalogan, hay que preguntárselo a los emisores (de esos comentarios) y no a mí”, finalizó.