El mercado inmobiliario en el sector agropecuario sufrió una fuerte caída del 17,8% en julio con relación a junio. Así lo indicó la Cámara Argentina de Inmobiliarias Rurales (CAIR), al publicar el índice de actividad del sector. Este índice refleja la actividad del mercado inmobiliario rural en todo el país.

En julio, según los datos difundidos por esa cámara, fue de sólo 36,49 puntos. La base del índice es de 97,5 puntos, que corresponde en forma histórica a su pico máximo registrado en septiembre del 2011. El índice de julio representa una significativa baja respecto al mes anterior, y un valor muy similar al registrado durante abril.

De acuerdo con el informe, diversos factores continúan influyendo en forma negativa sobre el normal desarrollo del mercado, como la creciente brecha cambiaria y el cepo reforzado. "Si bien los valores de los granos y la carne continúan sostenidos, la alta carga impositiva, las retenciones y, fundamentalmente, la proximidad de las elecciones de medio término, actúan como ralentizador en la actividad inmobiliaria rural", indicó el informe.

El InCAIR se conforma principalmente por resultados de la encuesta mensual de actividad efectuada entre socios de todo el país y operaciones rurales -compra, venta y alquiler de campos- realizadas en el período analizado. También se tienen en cuenta la cantidad de avisos publicitarios de campos en venta o alquiler en los principales medios gráficos de tirada nacional y regionales.

Además de las búsquedas y consultas efectuadas por inversores en la web de CAIR.