Expendedores de combustibles advirtieron hoy que deben vender más del doble de lo que comercializaban hace diez años para obtener rentabilidad, por lo cual pidieron auxilio al Gobierno.

Así lo indicó el presidente de la Federación de Expendedores de Naftas del Interior del país, Alberto Boz, quien se quejó por la carga impositiva que pesa sobre el sector, entre otras cuestiones.

En declaraciones a radio Rivadavia, el dirigente explicó que la crisis que atraviesan los expendedores queda reflejada en que "todas las estructuras de costos han pasado por encima de la rentabilidad de las estaciones de servicio".

"Por ejemplo, hace diez años, para lograr un punto de equilibrio, una estación debía vender 140 mil litros de combustible por mes. Hoy, necesita vender 320 mil litros", explicó el empresario.