El Banco Central emitió un billón de pesos desde principios de junio último cuando inició su escalada para sostener los precios de los bonos de la deuda, que se siguen derrumbando.

La autoridad monetaria pretende atenuar el hundimiento de los bonos en medio de una corrida de sus tenedores hacia el dólar. 

Los bonos que ajustan por inflación vienen cayendo por el temor de los inversores a que el Tesoro no pueda renovar los vencimientos.

Analistas alertan que la disparada de la deuda en pesos es uno de los principales desafíos que deberá enfrentar la flamante ministra de Economía, Silvina Batakis.

Cada vez son menos los inversores que se arriesgan a seguir prestándole al gobierno y prefieren desprenderse de los instrumentos que ajustan por CER.

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El economista Fernando Marull alertó que este lunes, día de la asunción de Batakis, el BCRA emitió casi $ 300.000 millones. 

El objetivo fue defender la curva de deuda de bonos en pesos, que fueron vendidos por bancos y empresas.

La deuda en pesos que ajusta por inflación empezó a caer desde hace casi un mes.

A esa altura del año, inversores institucionales se desprendieron de títulos ante el temor de que Economía no pudiese obtener el refinanciamiento necesario para cubrir esas deudas.

En junio, el BCRA emitió $ 700.000 millones, lo que se convirtió en fondos destinados a operar con dólar contado con liquidación.

Desde el 8 de junio, cuando comenzó la caída de bonos en pesos, el Central lleva emitidos un billón de pesos para compras.

A ese monto hay que sumar $ 400.000 millones destinados a financiar al Tesoro.

Esto aumentó en la misma cantidad el volumen de Leliqs, que ya llegó a $ 7 billones de pesos.

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En este escenario, la tasa del dólar futuro opera en alza por temor a que se acelere la devaluación.

Según datos del mercados, el lunes el BCRA intervino en los futuros del Rofex con US$ 1.500 millones, que se sumaron a los US$ 98 millones vendidos para evitar que se dispare el dólar oficial.

Fuentes del mercados hicieron notar que el volumen operado en el segmento de futuros fue el más alto en la historia para un día feriado en Estados Unidos.

Se operaron US$ 1.680 millones en Rofex y casi US$ 400 millones en el MAE.