Empresas norteamericanas plantearon este lunes  ante el flamante embajador de los Estados Unidos en Argentina, Marc Stanley, la necesidad de que Argentina arribe a un acuerdo con el FMI en tanto señalaron que el país debe “dejar atrás” la administración del comercio y la limitación de giro de dividendos al exterior

 Así lo hicieron saber luego de un desayuno de trabajo con miembros del directorio de la Cámara de Comercio de los Estados Unidos (AmCham Argentina) en la que definió como su primera reunión con las empresas radicadas en el país.

Junto al CEO de AmCham, Alejandro Díaz, participaron de la delegación Fernando Cozzi, Nicolás Vaquer, Gabriela Aguilar, Daniel Gonorazky, Diego Ordoñez, Silvia Bulla, Guillermo Browne, María Eugenia Tibessio, Martín Genesio y Gabriela Renaudo.

 Por parte de la misión diplomática, secundaron al embajador, el consejero Comercial Eric Olson y el consejero Económico Ernest Abisellan.

 Los empresarios señalaron “como un paso positivo el acercamiento de posiciones entre el gobierno argentino y el Fondo Monetario Internacional para arribar a un acuerdo que permita recuperar una posición de solvencia del país en los mercados financieros internacionales”.

 “Además de plantear la voluntad de aprovechar dichas oportunidades, se exploraron algunos de los principales desafíos del mercado local, como, la necesidad de dejar atrás el modelo de comercio administrado, las limitaciones para el pago de dividendos, las restricciones cambiarias, que generan un ambiente de incertidumbre y la falta de previsibilidad para el desarrollo de los planes de negocios”, señaló Amcham en un comunicado

 Díaz destacó “la labor que lleva adelante la entidad en materia de promoción del diálogo público – privado, y agradeció el interés del embajador Stanley por interiorizarse en la perspectiva de las compañías sobre las oportunidades y los desafíos del mercado local”.

 Del mismo modo, resaltó la vocación de la comunidad de negocios de AmCham por continuar trabajando, en forma colaborativa, en dos ejes críticos: ética y transparencia, y diversidad e inclusión.”

 Stanley señaló, por su parte, que uno de sus objetivos primordiales era “fomentar el comercio bilateral y la inversión estadounidense en Argentina, destacando las contribuciones de las empresas estadounidenses en la economía argentina, y mejorando la sinergia de las mismas en el mercado local para generar un mayor crecimiento económico que beneficie a ambos pueblos.”