El presidente Javier Milei descartó una nueva devaluación, insistió en el objetivo de levantar el cepo, defendió la competencia de monedas, destacó la baja de la inflación, y reconoció que los salarios actualmente son “miserables”, al repasar los principales temas de agenda en una entrevista televisiva con la agencia internacional Bloomberg.

Al referirse sobre una posible aceleración de la devaluación del peso frente al dólar, el jefe de Estado consideró que “no tiene ningún sentido hacer eso” y apuntó contra los que promueven esta idea indicando que “lo dicen algunos economistas locales y están absolutamente equivocados” y, al cuestionarlos, señaló: ”La primera pregunta es por qué yo tengo que hacer saltar el tipo de cambio hoy si el tipo de cambio libre paralelo coincide con el oficial".

Continuando en esa línea expresó: “¿Qué tipo de estupidez es esa de que tengo que hacer saltar el tipo de cambio cuando en realidad el tipo de cambio está alineado con el de mercado? Deberían ser más respetuosos de las decisiones de los individuos y no ser tan arrogantes” y agregó: "Me parece que a los economistas les cuesta salir de ciertos modelos mentales que traen en la cabeza. Y bueno, es como decimos nosotros, ¿no la ven?".

Al mismo tiempo, Milei reafirmó que la salida del cepo está en camino, pero prefirió no ponerle un plazo asegurando que cuando terminen de "limpiar el balance del Banco Central" y realizar "la reforma financiera", automáticamente irán "a un tipo de cambio totalmente libre" pero expresando que eso depende del mercado por lo que “no se puede definir el tiempo, porque si usted define el tiempo es porque entonces está haciéndolo por la fuerza".

Al respecto, sostuvo: "Esto depende de la voluntad de los individuos. Yo necesito que los individuos vayan mutando sus portafolios hacia una nueva estructura que me permita que el Banco Central deje de tener pasivos remunerados. Entonces, eso no se puede saber salvo que lo vaya a ser por la fuerza, pero hay mucha gente que le cuesta pensar en términos de libertad".

Salarios

En otro tramo de la entrevista, el mandatario reconoció el deterioro de los ingresos, pero desestimó que sea responsabilidad de su gestión, asegurando: “Hoy los salarios son miserables no por culpa nuestra, los salarios son miserables como consecuencia de 20 años de populismo. Cuando usted toma el salario promedio de la década del 90, hoy sería de 3 mil dólares”.

Al analizar este punto, Milei destacó que en el país se produjo un cambio cultural señalando que “los argentinos entendieron que el populismo no es la solución y que la solución que vendieron los delincuentes de los políticos y los delincuentes de los economistas eran falsas”, asegurando que “hay que ir por una solución pura y ortodoxa de mercado” y valoró: "Aun cuando estamos haciendo el ajuste más grande de la historia de la humanidad, mi popularidad aumenta".

En vistas a una recuperación de los sueldos, Milei sostuvo que se avanzaría en esa dirección a partir del descenso de la inflación y del levantamiento de los controles de capitales. Aunque insistió en que para llegar a ese punto todavía falta sanear el balance del Banco Central.

Banco Central

En ese sentido, manifestó: “Primero tengo que sanear el Banco Central y es importante entender esto: cuando usted tiene el Banco Central quebrado, los pasivos monetarios superan a los activos y eso se corrige con un nivel de precios más alto para licuar los pasivos monetarios; cuánto más quebrado está, más alto es el nivel de precios”.

A raíz de esto, explicó: "Nosotros estamos saneando el balance del Banco Central y en cuanto lo logremos ese nivel de precios se va a ir achicando porque la pendiente se reduce y la inflación baja; por eso es importantísimo sanear el Banco Central para que no exista esa presión”.

Tarifas

Por otro lado, el Presidente anticipó que la quita de subsidios en las tarifas de los servicios públicos recién se completará en tres años y explicó que tiene que ver con la forma de recalibrar los precios.

Al respecto, indicó que se “puede hacer todo de corto (plazo) o lo puede repartir en el tiempo” sobre lo que advirtió: "Si nosotros lo hacemos torpemente, como recomiendan algunos, el problema es que eso lo va a frenar la Corte Suprema de Justicia”, recordando que “eso ya se lo hizo al gobierno de (Mauricio) Macri”.

Por lo tanto, explicó: "Lo que nosotros hicimos fue incorporar como restricción el fallo de la Corte Suprema de Justicia y de esa manera terminamos recomponiendo la ecuación económica financiera del contrato en tres años".