El presidente del Banco Mundial, David Malpass, pidió a los miembros del G20 "no escatimar" en recursos para dar alivios de deuda permanentes a los países que enfrentan un fuerte crecimiento de la pobreza y una importante fragilidad económica.

Malpass aseguró que, de no mediar esta ayuda, podrían producirse defaults masivos en el mundo.

"La reducción de la deuda y la transparencia permitirán una inversión productiva, clave para lograr una recuperación más temprana, más sólida y más duradera", dijo el titular del Banco Mundial a los líderes del G20 durante una reunión por videoconferencia.

"Tenemos que evitar hacer muy poco ahora y luego sufrir incumplimientos desordenados y reestructuraciones repetidas de la deuda como en la década de 1980", declaró.

El director del Banco Mundial remarcó que tiene que haber importante reestructuraciones de deuda en todo el mundo para evitar que se produzca una década perdida, como sucedió con América Latina entre 1980 y 1990.