El Gobierno transfirió a 16 fondos fiduciarios más de US$1.000 millones durante el 2023 para financiar obras y proyectos de distinta índole, discrecionalmente y con escasos controles.

En el trayecto del año que llega a su fin, el Ejecutivo nacional, mayormente a cargo de Alberto Fernández, destinó unos US$1.037.615.477 millones, equivalentes a $858.108.000.000 millones, a 16 fondos fiduciarios que financiaron entre otras áreas a Infraestructura del Transporte y el Fondo de Integración Socio Urbana para urbanizar barrios populares. El dato se desprende de una investigación de TN en base al sitio Presupuesto Abierto.

Los fondos fiduciarios son fideicomisos públicos, que sirven como herramienta para financiar obras y proyectos por parte de los gobiernos. Un detalle no menor es que dichos fondos tienen pocos controles y que las auditorías a cargo de la Auditoría General de la Nación (AGN) y la Sindicatura General de la Nación (SIGEN) son posteriores a la utilización de los recursos.

El mecanismo de funcionamiento consiste en que el Gobierno, a través de ministerios u organismos del Estado (fiduciante), transfiere bienes o millonarias sumas de dinero a entidades, por lo general bancarias (fiduciarios), para que administren esos fondos en beneficio del primero.

Aunque los contratos especifican que los fondos otorgados deben utilizarse para un bien o fin determinado y no puede cambiarse ese destino, existen algunas “trampas” que colocan interrogantes sobre dicha regla.

A raíz de eso, en la Ley Ómnibus que mandó Javier Milei al Congreso, se busca aumentar el control sobre estos fondos, proponiendo “crear, modificar, transformar y/o eliminar fondos fiduciarios públicos creados por normas con rango legal, inclusive los destinados a subsidios, revisando su procedencia y destino a los efectos de lograr una mayor racionalidad, eficiencia, eficacia, transparencia y control de la utilización de los recursos públicos”.

En caso de aprobarse la normativa, el presidente tendrá la potestad de utilizar los fondos a discreción para emergencias económicas, catástrofes o para inyectar dinero en proyectos de particular interés. Actualmente, hay 29 fondos fiduciarios que manejan un presupuesto de entre US$8 mil y US$10 mil millones.

Los fondos fiduciarios se componen de dinero de impuestos, gravámenes o transferencias directas del Estado nacional. Entre los que más ingresos recibieron durante 2023 están:

  • Fondo Fiduciario del Sistema de Infraestructura del Transporte (FFSIT): en 2023 el Estado le giró $415 mil millones.
     
  • Fondo Fiduciario PROCREAR: en 2023 el Estado le envió $102.000 millones para gastos de capital.
     
  • Fondo Fiduciario para subsidios a consumos residenciales de gas licuado de petróleo (ley 26.020): en 2023 se le giraron $68 mil millones.
     
  • Fondo Nacional de Desarrollo Productivo (FONDEP): en 2023 el Estado le entregó $19 mil millones y otros $23 mil millones para gastos de capital.
     
  • Fondo Fiduciario Federal de Infraestructura Regional: en 2023 le entregaron $16 mil millones.

Los 29 fideicomisos que figuraban en el Presupuesto 2023 del Ministerio de Economía, tuvieron ingresos totales por $1.46 billones, de acuerdo al análisis de TN. La mayor parte del dinero sale de las cuentas públicas: $858 mil millones corresponden a transferencias directas del Tesoro Nacional.

La SIGEN y la AGN realizaron auditorías sobre tan solo 15 de los fondos fiduciarios y en algunos casos fueron controles que se realizaron por única vez hace más de 10 años, según aportó la información recabada por TN.