El Gobierno está evaluando todas las concesiones de las rutas, autovías y autopistas nacionales y tomó la decisión de no renovar los contratos para que la administración esté en manos de Vialidad en los casos en los que se detecten incumplimientos en el mantenimiento e inversiones.

Así lo confirmaron a la agencia NA calificadas fuentes de la administración de Alberto Fernández, las que precisaron que se está realizando una auditoria de cada de una de las concesiones y hablando con las empresas concesionarias ante cada una de las falencias halladas.

El Gobierno dará a conocer en las próximas semanas, cuando finalice la auditoría, cuáles serán las rutas, autovías y autopistas que volverán a manos del Estado, para ser administradas en adelante por Vialidad Nacional y sin que por ahora estén previstas licitaciones para volver a concesionarlas.

Según pudo averiguar esta agencia, la primera ruta en volver a manos del Estado para ser administrada por Vialidad Nacional será la 34 General Martín-Miguel de Güemes, que nace en Santa Fe y atraviesa Santiago del Estero, Tucumán, Salta y Jujuy, terminando luego nuevamente en Salta, con un trayecto de 1.488 kilómetros.