El Gobierno dio hoy marcha atrás con la reposición del 10,5% del IVA a la leche común y la reducción de ese tributo a las aditivadas, tras la polémica con la oposición por el posible aumento de precios que podría provocar.

Ese cambio tributario estaba previsto en el proyecto de ampliación presupuestaria pero finalmente fue dejado sin efecto.

Así lo anunciaron los diputados nacionales y economistas del Frente de Todos Itai Hagman y Fernanda Vallejos, quienes participaron de una teleconferencia con el ministro de Economía, Martín Guzmán, junto a otros integrantes oficialistas de las comisiones de Presupuesto y Finanzas, además de Sergio Massa y Máximo Kirchner.

"Acordamos dejar las discusiones vinculadas a cuestiones tributarias a un debate profundo que se dará con el próximo presupuesto. Una reforma tributaria integral que la Argentina necesita hace mucho tiempo. La medida puntual del IVA y la leche quedará para ese momento", dijo Hagman, referente de Nueva Mayoría en el Frente de Todos.

En 2019, el Gobierno de Mauricio Macri eliminó el IVA para la leche común pero dejó el 21% de alícuota para las aditivadas y fortificadas.

La intención de Guzmán era reducir a la mitad el IVA que pagan las leches aditivadas y de esa manera equiparar en un 10,5% con la leche común.

Sin embargo, la decisión final de retrotraer esta medida priorizó no abrir en lo inmediato un frente de conflicto con la oposición, postergando el debate sobre la política tributaria para más adelante.

"Conversamos sobre el proyecto de reforma tributaria en el que trabaja el gobierno. En ese marco decidimos quitar de la enmienda presupuestaria a tratar mañana, los artículos referidos al IVA sobre la leche, que se tratará en el proyecto impositivo", dijo Vallejos.

Por otra parte, Hagman confirmó en diálogo con NA que no habrá cambios en el texto de ampliación presupuestaria sobre la autorización que realiza a la posibilidad de canjear deuda en pesos por deuda en dólares, tras las quejas que habían planteado diputados del interbloque Federal.

"El proyecto queda como está, y es para potenciar el endeudamiento en pesos, aunque parezca contradictorio, porque se trata de favorecer la salida de algunos fondos especulativos que entraron en bonos en pesos y que cuando venzan van a cobrar y dolarizarse en el Contado con Liquidación. Entonces la idea es darles un bono en dólares a 2035 y evitar que dolaricen en el CCL ahora", explicó.

Para Hagman, "quedó clara la orientación del Poder Ejecutivo de priorizar el financiamiento en pesos después de cuatro años de dolarización de la deuda externa que, combinada con la enorme salida de capitales, dejó al país en una situación de fragilidad externa extrema".