El Gobierno bonaerense decidió hoy volver a extender el plazo para el canje de deuda emitida bajo legislación extranjera, esta vez hasta el 29 de enero.

El plazo anterior había vencido el pasado lunes, pero el Ministerio de Hacienda y Finanzas bonaerense decidió prorrogarlo por décima vez, en busca de renegociar 7.148 millones de dólares en vencimientos.

"La Provincia planea continuar el diálogo de buena fe con los acreedores privados externos, con el objetivo de alcanzar un acuerdo que respete su capacidad de pago y el marco de sostenibilidad de la deuda pública provincial en el mediano y largo plazo", resaltó el Poder Ejecutivo bonaerense en un comunicado.

El monto a renegociar con los acreedores equivale al 70% de la deuda bruta de la Provincia.

La propuesta oficial incluye canjear 23 bonos en moneda extranjera por nuevos títulos, con un período de gracia de tres años, un recorte del 55% en el interés y del 7% en el capital, y una extensión de la vida promedio de los títulos de 13 años.

El objetivo de la administración de Axel Kicillof es ahorrar 5 mil millones de dólares hasta 2030.

Si no se cierra un acuerdo con los bonistas, en los próximos cuatro años habrá que pagar cerca del 80% del total adeudado a acreedores externos.

En siete meses de negociaciones, el Gobierno no logró avanzar con la negociación: de hecho, a fines de noviembre último la Coalición de Tenedores de bonos provinciales publicó un pliego de condiciones para las negociaciones, que tensaron la relación con Kicillof.

En ese documento, los bonistas se quejaron de que el Gobierno provincial "no se ha comprometido con sus tenedores de bonos para encontrar una solución adecuada a sus circunstancias específicas".

Para este año, la Gobernación estima tomar deuda por 64 mil millones de pesos -que representan el 3,3% del Presupuesto provincial, de 1,9 billones de pesos-.

Ese dinero lo buscará en el mercado interno o en organismos multilaterales de crédito.