El Gobierno autorizó un nuevo aumento en las tarifas de electricidad de las distribuidoras Edenor y Edesur,  que solo alcanzará a 11.500 grandes usuarios, con vigencia desde el primero de agosto.

La decisión -que no alcanzará a los usuarios residenciales y tiene como fin reducir los subsidios estatales- se formalizó por medio de dos resoluciones del Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE) publicada este martes en el Boletín Oficial.

Según lo dispuesto, para Edenor el valor de la tarifa media asciende a $5,280/kw, y para Edesur, $5,176/kwh.

Así, las subas serán de 16% para los usuarios de baja tensión y del 19% para los de media: es el  segundo incremento en el año que tienen las grandes industrias.

El incremento otorgado esta vez alcanza a los grandes usuarios de cada distribuidora, con consumos superiores a 300 kWh.

Ambas empresas tienen un plazo de cinco días corridos para publicar los cuadros tarifarios vigentes en por lo menos dos diarios de mayor circulación de su área de concesión. También, de acuerdo al consumo mensual de cada usuario, tanto Edenor como Edesur deberán calcular el monto del subsidio correspondiente, el que deberá ser identificado de manera destacada como "Subsidio Estado Nacional" en la sección de la factura que contiene la información al cliente.

El ENRE explicó que teniendo en cuenta los Precios de Referencia de la Potencia (POTREF), los Precios Estabilizados de la Energía (PEE) y el Precio Estacional de Transporte (PET) se calculó el cuadro tarifario que entrará en vigencia a partir de las 00:00 del primero de agosto de 2021.

El último incremento para los residenciales fue del 9%, se aplicó en mayo último y había generado tensión dentro del equipo económico, ya que el ministro Martín Guzmán pretendía una actualización tarifaria mayor para reducir los subsidios, mientras que el secretario de Energía, Federico Basualdo, estaba a favor de un aumento como el que finalmente se estableció.

En aquel momento, el ENRE señaló que "de continuar vigentes los ajustes previstos en la Revisión Tarifaria Integral de 2017, así como la política de quita de subsidios al precio de la energía que implementó el Gobierno de Cambiemos, las tarifas del servicio de electricidad en el AMBA serían hoy, en promedio, un 160% más elevadas".

Por ese motivo, indicó que "desde diciembre de 2019, el Gobierno del Frente de Todos ha priorizado la necesidad de morigerar el impacto tarifario sobre el poder adquisitivo de familias, comercios e industrias, en el contexto de emergencia económica, sanitaria y energética".