El presidente Alberto Fernández prevé anunciar el próximo lunes los detalles del decreto para impulsar la conversión de planes sociales en empleo registrado, en paralelo al acto que realizará la CGT para celebrar el 17 de octubre.

Así lo indicaron a la agencia NA fuentes de la Casa Rosada, las cuales señalaron que los ministros de Trabajo, Claudio Moroni, y de Desarrollo Social, Juan Zabaleta, trabajan en la letra chica de la iniciativa.

Todo se aceleró este viernes luego de que el jefe de Estado hizo el anuncio formal en el marco de su discurso de cierre del Coloquio de IDEA.

El decreto dará un marco normativo a las actas de acuerdo que ya se vienen firmando con distintos sectores (gastronómicos, construcción y rurales), que ahora se extenderán a toda la economía, con especial acento en las pymes, indicaron las fuentes consultadas.

La CGT realizará un acto el lunes con motivo del Día de la Lealtad Peronista, cuyo eje será la consigna "Desarrollo, producción y trabajo".

El acto se realizará frente al Monumento al Trabajo, en avenida Paseo Colón al 800.

En IDEA, Fernández dijo que se prepara un decreto por el cual quienes perciben planes sociales podrán acceder a un empleo privado "sin perder ese derecho".

"Cambiar planes por empleo debe ser nuestro primer objetivo", ratificó el jefe de Estado.

Falta de empleo

Y sostuvo que "la asistencia del Estado no puede ser el remedio para la falta de empleo", en línea con lo manifestado por el papa Francisco.

Fernández dijo que cuando concluyó el gobierno de Cristina Kirchner en 2015 "había menos de 200 mil planes sociales mientras que cuando él asumió en 2019, se habían multiplicado y ya había unos 800 mil.

Sostuvo que "la asistencia del Estado a los sectores más postergados es sólo un paliativo para sobrellevar la pobreza".

Y advirtió que "no existe otro remedio que la inversión privada, que asocia el capital al trabajo, para lograr un desarrollo sostenible en nuestra sociedad".

Fernández destacó los nuevos acuerdos que impulsó el Gobierno nacional con empresarios y sindicatos de la construcción, del sector rural, gastronómicos y hoteleros, suscriptos en las últimas semanas, con el objetivo de que "los que hoy son beneficiarios de planes puedan ser empleados en la actividad privada sin perder ese derecho".

Uno de los temas que se debe definir en el decreto es el período por el cual se mantendrían los planes sociales para los nuevos empleados en blanco, que rondaría los seis meses, pero aún es objeto de discusión.

También cómo se aplicaría el sistema en función de los distintos sectores, ya que, como ejemplo, no es lo mismo un empleado de un restaurante que uno de una compañía de informática.

Además, el empleador deberá estar al día con el pago de aportes, según se prevé en el borrador del decreto.

Fernández sostuvo que "una economía que crece, produce y exporta necesita de una fuerza laboral bien paga y protegida en sus derechos".