La economista Diana Mondino destacó que los inversores institucionales, en especial las aseguradoras, pueden ser el “puente” para solucionar el desfase entre las medidas de corto y largo plazo, pero reclamó al mismo tiempo políticas para desarrollar un mercado de capitales que facilite su instrumentación.

Mondino advirtió que sobre las dificultades presentes para abordar políticas de largo plazo que no conspiren con las medidas de urgencia que cualquier gobierno debe llevar a cabo, en el marco de una situación macroeconómica que calificó como “horrible”.

Al disertar en el 14° Seminario Internacional de la Asociación Civil de Aseguradores de Vida y Retiro de la República Argentina (AVIRA), la economista sostuvo que “no va a ser fácil resolver el problema” en tanto continúe el “déficit (fiscal) constante” que “lleva a un endeudamiento creciente”. Asimismo, criticó la existencia de “un sistema impositivo que hace onerosa la posibilidad de generar trabajo”.

Para Mondino, el “puente” entre las políticas de corto y largo plazo requiere de un financiamiento que puede ser abordado por los inversores institucionales, “y entre ellos em primer lugar las compañías de seguros”“Claramente, pueden ser una oportunidad de oro”, señaló, pero advirtió que es necesario remover una serie de obstáculos existentes en “una Argentina en la que es muy difícil ahorrar”.

Al respecto, indicó que en el país “las empresas no tienen ningún interés en abrir su capital” y así permitir que “todos participen de su futuro”, en parte porque “no todas tienen sus papeles en orden”, pero principalmente porque no tienen “proyectos de inversión que les resulten atractivos”.

“Estamos en un momento en que, más que en invertir, las empresas están más focalizadas en sobrevivir”, advirtió. En cuanto a la cartera de inversiones disponibles para las compañías, Mondino criticó lo que denominó “mentiritas” como “la forma en que se acepta la contabilidad de los activos”.

En ese sentido, se refirió a la alta proporción de títulos públicos, computados a un valor que difícilmente las compañías podrían obtener si quisieran liquidarlos en el mercado. “Por favorecer la financiación del estado se está perjudicando a las compañías de seguros”, señaló al respecto. Si bien reconoció que en un contexto de recesión y pobreza “es muy difícil ahorrar”, Mondino indicó que quienes tienen la capacidad de hacerlo “no tienen cómo canalizar sus fondos”.

“Los depósitos en los bancos tienen tasas fuertemente negativas y las propias entidades financieras no tienen muchas otras posibilidades, guiadas un poco con la zanahoria y otro poco con el garrote a invertir en bonos del gobierno”, señaló. En cuanto a las opciones en el mercado de capitales, admitió que para acceder a ellas “se requiere de más capacitación”, además de indicar que “están limitadas por problemas de liquidez”.