Por Sebastián Hadida

Una apuesta potente. Correo Argentino lanzó días atrás Correo Compras, una plataforma pública de e-commerce que llega para disputar la hegemonía del unicornio criollo Mercado Libre, el gigante de origen nacional con mayor peso en la Bolsa de Nueva York, con una cotización que se duplicó en el último año.

El contexto de la pandemia ayudó a acelerar el hábito de las compras a través de internet entre los argentinos, y sobre esa premisa se montó Correo Argentino para jugar fuerte en el mercado, si bien la idea no es nueva sino que se remonta al 2015.

Los primeros pasos no los da en el vacío, ya que Correo Compras aprovecha la estructura que cuenta Correo Argentino con 1.482 sucursales, 1.067 centros de distribución, y 20 plantas de logística en todo el país.

En las primeras horas desde su puesta en marcha, ya recibió más de 3.000 consultas para incorporarse a la plataforma y ya suman más de 1.000 marcas, desde tecnología y almacén hasta limpieza y perfumería.

Algunas de las marcas importantes que ya se exhiben en la góndola virtual de Correo Compras son las multinacionales LG, Samsung, Phillips, Dell y Unilever, además de las alimenticias locales Arcor y Molinos.

La idea es seguir expandiendo y diversificando la oferta de productos en la tienda virtual, sumando proveedores tanto de pymes y pequeños productores como grandes empresas.

Aunque la primacía de Mercado Libre no está en discusión por la cantidad de años que lleva haciendo punta no sólo en Argentina sino en toda la región, Correo Compras presenta una ventaja clave a la hora de competir ya que se minimizan las comisiones, achicando los costos de transacción para el consumidor.

El otro activo fuerte que tiene a favor Correo Compras es que por default trabaja con la línea de beneficios de Ahora 6, 12 y 18 (en Mercado Libre también existen estos planes pero para productos seleccionados), por lo que no depende de promociones específicas de tarjetas de crédito para la financiación.

Por otra parte, algunos productos de la tienda podrán adquirirse a través de la tarjeta Alimentar, una herramienta de subsidios que impulsa el Ministerio de Desarrollo para la compra de artículos de la canasta básica.

Una ventaja adicional de Mercado Compras es que habilitará la posibilidad de armar paquetes "multi seller", combinando por ejemplo productos alimenticios o de perfumería con una bicicleta o un televisor, ahorrando de esta forma costos de envío.

Esto es posible en función de que la mercadería queda depositada en los mismos centros de distribución de Correo Argentino, independientemente del rubro de los productos.

Otra diferencia, esta vez a favor de Mercado Libre, es que Correo Compras sólo trabajará, en principio, con artículos nuevos, dejando fuera de su dominio el mercado de usados.

En Mercado Libre cualquier persona puede registrarse y exhibir sus productos nuevos o usados en el marketplace, y están autorizadas las transacciones entre individuos, mientras que en Correo Compras no existe esa opción.

Se trata, en definitiva, de una lógica diferente: mientras que en Mercado Libre prima la libertad de la oferta y la demanda, en Correo Compras hará un control más cercano de los precios, apuntando a que sean justos y accesibles.

En declaraciones radiales, la presidenta del Correo Argentino, Vanesa Piesciorovsky, negó que empieza a configurarse una rivalidad con Mercado Libre, al sostener que la firma de Marcos Galperín "es un gran cliente para el correo oficial" dado que reparte "uno de cada cuatro paquetes".

"No buscamos competir con Mercado Libre, lo que tenemos es un servicio diferencial, y lo estamos desarrollando para modificar la matriz de negocio del correo oficial, un camino que están recorriendo todos los correos de bandera", resumió la funcionaria.

"Es algo que los correos de bandera tenemos que hacer para evitar las comisiones terribles que se están cobrando", agregó.

Pese a relativizar la competencia, claramente Correo Compras se instala en un territorio en el que Mercado Libre es amo y señor, con OLX ocupando una porción de mercado pero sin llegar a hacerle sombra.

El tiempo dirá si la apuesta del correo oficial será apenas un cosquilleo para la empresa líder en comercio electrónico o si podría representar un dolor de cabeza serio en el futuro.