Una empresa de hidrocarburos enfrenta cargos por contaminar canales de riego en Centenario con residuos originados del lavado de maquinaria utilizada en el fracking. La Fiscalía de Delitos Ambientales confirmó que la denuncia inicial fue realizada por el tomero del consorcio de riego de la región, quien detectó la presencia de aceite en el agua durante sus inspecciones habituales.

La Fiscalía de Delitos Ambientales sancionó a la empresa en un primer momento con la paralización de las cuentas económicas de la empresa y ayer lunes se efectuó un embargo en múltiples cuentas de la compañía.

El fiscal jefe de Delitos Ambientales, Maximiliano Breide Obeid en diálogo con Radio 7 expresó: “Los residuos peligrosos que provienen de esta actividad por el lavado y los residuos tenían que ser enviados a una planta de tratamiento. No ocurría así, utilizaban las mismas instalaciones de la juguera, para depositar los residuos en piletas”.

La contaminación de los canales ocurrieron entre enero y agosto del corriente año y fue descubierto tras dos denuncias, una de los propietarios de tierras y otra del tomero encargado del consorcio de riego. Fiscalía realizó un allanamiento en la ex juguera, donde operaban dos sociedades vinculadas a la misma persona y se constató que los residuos peligrosos no eran depositados en piletas habilitadas.

“Las piletas no estaban habilitadas ni tenían la impermeabilidad que deben tener para este tipo de residuos. Lo que pudimos ver y tomar muestras es que filtraba hacia las napas pero además tenía un cráneo que va directamente con lo cual también contaminaba el canal de riego” indicó Breide Obeid.

El Fiscal indicó que estos delitos ambientales suelen ser consecuencia de decisiones económicas con el objetivo de abaratar gastos. La empresa habría evitado los costos del tratamiento adecuado de los residuos, al incumplir la normativa que obliga a enviarlos a plantas especializadas de tratamiento.

“Cuando nos llegó la denuncia paralizamos todas sus cuentas y ayer trabamos embargos. Todos los casos de delitos ambientales tienen que ver con ahorrarse dinero o por no utilizar los elementos que se tienen que usar en este tipo de casos o por no hacer el tratamiento correspondiente, siempre con algún beneficio económico” agregó el fiscal jefe.

A pesar de la gravedad de los hechos, no se reportaron denuncias de productores agrícolas afectados. Además de las acciones penales, el caso podría derivar en sanciones administrativas por parte de los organismos de control.

La empresa llevaba operando poco más de un año y estaba autorizada únicamente para el lavado de maquinaria utilizada en el fracking. El proceso penal determinará si la empresa y sus responsables incurrieron en un delito ambiental y no se descartan más sanciones económicas por parte del organismo de control.

(Artículo realizado por el Servicio de Noticias de Canal 7 Neuquén).