El presidente de la Federación Agraria Argentina (FAA), Carlos Achetoni, se sumó a las voces críticas del campo sobre la nueva reglamentación del Gobierno Nacional para la venta de maíz al exterior.

“Lo malo de todo esto es que en definitiva todo lo que se resuelva no termina perjudicando a nadie más que al producto”, señaló Achetoni en diálogo con Eduardo Feinmann en el programa “Alguien tiene que decirlo” de Radio Rivadavia.

Además agregó que desde el Gobierno con “esta incertidumbre generan menos expectativa de producción”, entendiendo que el anuncio, sumado al retraso en la resolución de la flexibilización para la exportación de carne, a las condiciones climáticas, al encarecimiento de los insumos y al factor del dólar se traducen en aspectos inquietantes que afectan la normal productividad del sector. Sin embargo no duda en que “el productor va a seguir produciendo por una cuestión innata, pero no es lo que necesita como estímulo para seguir adelante”.

La medida adoptada por el Ministerio de Agricultura exige una serie de datos adicionales a los exportadores para autorizar la presentación de las Declaraciones Juradas correspondientes. La información a presentar a partir de ahora deberá incluir: la certificación de que la mercadería está adquirida, junto con la constatación de un comprador en el mercado externo y de un buque asignado para el traslado.

Achetoni destacó que la resolución llega en un momento de auge para el cereal ya que “hace muchos años que no se lograba que el maíz en su producción superara a la de soja, cosa que se ha conseguido y que si no le ponen techo puede ser aún mayor”.

El adelantamiento de Declaraciones Juradas de los productores por más de dos millones de toneladas, alcanzando los 38,5 millones de toneladas exportables para la campaña 2021/22, motivó la decisión de la cartera que encabeza Julián Domínguez.