Las cámaras de empresas de transporte público de pasajeros por automotor del AMBA advirtieron que se encuentran en "estado de alerta" por el "congelamiento tarifario" y aseguraron que, ante la caída en la recaudación, se "dificulta" el cumplimiento de las frecuencias que garantizan el distanciamiento social necesario por el coronavirus.

Señalaron que además están "los costos adicionales que implican trabajar en medio de una pandemia, cumpliendo protocolos y no pudiendo disponer del 100% del personal".

Mediante un comunicado, aseguraron que ello "cada vez dificulta más el cumplimiento de las frecuencias al máximo para garantizar el distanciamiento social, según protocolos y normativas vigentes".

Así, la Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor (AAETA), la Asociación Civil del Transporte Automotor (ACTA), la Cámara Empresaria del Autotransporte de Pasajeros (CEAP), la Cámara Empresaria del Transporte Urbano (CETUBA) y la Cámara del Transporte de la Provincia de Buenos Aires (CTPBA) subrayaron que se encuentran "en estado de alerta".

La medida responde al "congelamiento tarifario que ya supera los dos años, la caída de recaudación fruto de la pandemia, y el cálculo de compensaciones con precios de insumos que llevan ocho meses de atraso respecto al actual aceleramiento inflacionario".

"No es nuestra intención llevar alarma a la población, en medio de la gravedad generalizada del actual contexto sanitario y social, pero sí nos mueve la responsabilidad para comunicar con total transparencia la gravedad de la situación que atraviesa del sector", señalaron.

En ese sentido, remarcaron que "la falta de renovación de material rodante con las consecuencias sobre la seguridad vial y la calidad de los servicios y sus frecuencias, sumado al deterioro de los ingresos, fruto del aceleramiento de la inflación respecto de compensaciones mal calculadas, y tarifas atrasadas, generan una situación que en algún momento llega a su límite".

"Alertamos a la población y a las autoridades que, de llegarse a esta situación, no será por la mala voluntad de los operadores, sino por la falta de adecuadas condiciones económicas y financieras frente al actual contexto inflacionario", insistieron.