Los múltiples cierres de locales gastronómicos en el último período son evidencia del duro impacto sobre la economía generado por la pandemia de la COVID-19. La dura realidad trae aparejada que muchos trabajadores del rubro sean despedidos sin respetar sus derechos.

Quedarse sin trabajo en plena cuarentena y ante un contexto de clara recesión afecta no sólo el bolsillo: los trabajadores se ven desmoralizados y con nulas expectativas de conseguir un nuevo empleo. Las limitaciones para la circulación, decretadas por el Gobierno con el objetivo de frenar el avance del virus, se convierten en un agravante para aquellos que han sido despedidos y emprenden una búsqueda laboral.

Las "formas", también, dejan mucho que desear: despidos por WhatsApp y arreglos con los empleadores, por menos plata de la que les corresponde, son corrientes en tiempos de pandemia. Tal es el caso de La Parolaccia, la cadena especializada en cocina italiana y mediterránea, que anunció el cierre de dos de sus locales: uno en Puerto Madero, Casa Tua, y el otro en San Isidro, La Bistecca. Como consecuencia, la compañía informó el despido de 61 trabajadores.

En el actual contexto algunos empresarios gastronómicos redefinen su paquete accionario. En el caso de La Parolaccia y La Bistecca, marcas pertenecientes a los hermanos Lore, la decisión fue desprenderse de los locales por los altos costos que deben afrontar en términos de alquileres y pago de salarios. Los trabajadores despedidos por la firma confirman que la empresa "no tuvo reparos en despedir a todo el personal". En el más promisorio de los casos les ofrecieron el 60% de lo que les corresponde de indemnización.

Según La Izquierda Diario, la empresa mencionada tiene una facturación que oscila entre $14.021.683 y $70.108.416. Food & Service, la fábrica perteneciente a la cadena de restaurantes La Parolaccia, recibe el Programa de Asistencia de Emergencia al Trabajo y la Producción (ATP) implementado por el Gobierno para "cuidar el trabajo y garantizar la producción". Aún así, los despidos son un hecho.