Las empresas públicas y privadas más grandes del mundo se alejan de la meta de emisión cero para el 2050 a causa de “la creciente inflación de los precios de la energía y la inseguridad del suministro”, según advierte un informe de la empresa Accenture.

El análisis elaborado sobre los compromisos de reducción de emisiones y los datos aportados por 2000 empresas de todo el mundo, asegura que el 93% de las empresas que se fijaron el objetivo de alcanzar la emisión cero para 2050, no lo alcanzara logrará si no duplica al menos el ritmo de reducción de emisiones para 2030.

El diagnóstico que aporta el informe aclara que esta situación se da “a pesar de que cada vez más empresas de todas las regiones están estableciendo objetivos de descarbonización claros y públicamente visibles, con un aumento récord del número de objetivos corporativos validados por la iniciativa Science- Based Targets (SBTi) sólo este año”. En esa línea, aseguró que “además, el 84% de las empresas tiene previsto aumentar las inversiones en sus iniciativas de sostenibilidad antes de finales de 2022”.

El análisis refleja que “a pesar de los compromisos adquiridos, sólo 7% de las empresas está en vías de alcanzar sus objetivos de cero emisiones de alcance 1 y 2 a los ritmos de cambio observados”. En tanto que señala que “si se trasladan los objetivos a 2050, ese porcentaje aumenta ligeramente hasta un mero 8%”.

LEE: Reclaman que el valor de referencia de la garrafa aumente a $2.100

A su vez, alerta que “incluso en un escenario en el que las empresas aceleran la reducción de emisiones al doble de las tasas actuales en los años hasta 2030 y luego al triple, el 59% seguiría sin conseguirlo en 2050, la fecha límite que se considera necesaria para evitar los impactos más catastróficos e irreversibles del cambio climático”.

Mauricio Bermúdez-Neubauer, líder global de estrategia e inteligencia de carbono en Accenture, expresó que para avanzar a la velocidad y la escala requeridas por la ciencia y la economía, “será fundamental que las empresas desarrollen múltiples capacidades de inteligencia de carbono al mismo tiempo”.

“Esto significa integrar datos y conocimientos sobre el carbono listos para la toma de decisiones en todos sus sistemas y procesos, lo que permite un uso eficiente de los recursos financieros y no financieros junto con una sólida gestión del riesgo en el despliegue de las tecnologías digitales, biológicas e industriales que serán necesarias para alcanzar el cero neto”, agregó.