No le gustaba nada al local estar jugando con uno menos el clásico. O semi clásico.

Entonces, el final del primer tiempo fue una ocasión.

Antes de que los jugadores se fueran al descanso se produjo un revuelo.

El arquero suplente, Bruno Galván, terminó amonestado por haber protagonizado un encontronazo con el 8 rival, quien estaba

jugando, Facundo Mater, quien también vio la tarjeta amarilla.

Se habla de Deportivo Morón-Nueva Chicago, disputado un domingo de verano.

Ya en el segundo período, terminaron diez contra diez pero el resultado nunca se alteró.

Fue cero a cero clavado.