El jugador ecuatoriano Pedro Pablo Perlaza, de pasado en el club Delfín de Ecuador fue secuestrado en la noche de ayer, en la ciudad ecuatoriana de Esmeraldas, en circunstancias que todavía están siendo investigadas, siendo la Policía Nacional una de las principales sospechosas.

Según denunció la propia familia del defensor, el mismo fue interceptado en la calle por una persona que andaba en una moto, y fue obligado a subirse a un vehículo en el que lo trasladaron a un lugar desconocido.

Ante el revuelo de la noticia, la Policía Nacional ecuatoriana emitió un comunicado desde su cuenta oficial de X (anteriormente llamada Twitter) en el que asegura tener conocimiento de la “presunta desaparición involuntaria” de un sujeto denominado “Pedro P.”, además de “Juan M.”. En la publicación se afirma que el cuerpo policial inició de manera inmediata las labores investigativas y operativas alrededor del hecho.

La última vez que Perlaza fue visto fue el último domingo, en una parroquia, junto a un amigo. Al día siguiente, su familia realizó la denuncia.

Uno de sus hermanos declaró ante la prensa que alrededor de las 16 horas del domingo se lo vio con la madre y con otros familiares, pero después dijo que se iba a su casa a descansar, “desde entonces no sabemos nada de él”.

Este caso se suma a otros secuestros que se han dado en las últimas semanas en el país presidido por Daniel Noboa, quien declaró estado de excepción en el mes de octubre y lo ha extendido por 30 días más.

Además, en las últimas horas la fuerza de seguridad ecuatoriana emitió un nuevo comunicado, en el que informa haber liberado a la víctima de un secuestro similar al sufrido por Perlaza, aunque no se comunicó el nombre del liberado.