Tres derrotas para los argentinos en la qualy de Roland Garros, aunque aún esperan por su suerte
Los hermanos Cerúndolo y el santiagueño Trungelliti perdieron en la última ronda de la clasificación, pero todavía podrían ingresar al cuadro principal como "lucky losers".
Los hermanos Francisco (116 del ránking mundial) y Juan Manuel Cerúndolo (147°), y el santiagueño Marco Trungelliti (236°) tropezaron este viernes en la última fase de la clasificación al cuadro principal de Roland Garros, el segundo Grand Slam de la temporada, aunque aún podrían ingresar como "lucky losers".
El que más cerca estuvo, sin dudas, fue "Juanma" Cerúndolo que desperdició tres match points para sentenciar su duelo ante el suizo Henri Laaksonen (150°), que terminó derrotándolo con parciales de 7-6 (5), 3-6 y 7-6 (7).
Fue un duro revés para el menor de los hermanos porteños que esta temporada ganó el ATP de Córdoba y un Challenger de Roma.
La misma suerte corrió Francisco Cerúndolo, de 22 años, que un rato más tarde cayó frente al italiano Alessandro Giannessi (159°) en una batalla de dos horas de juego que se resolvió con parciales de 6-4, 3-6 y 6-2.
"Con decir día negro me quedo corto", publicó el finalista del ATP de Buenos Aires 2021 en sus redes sociales, aunque luego borró el tuit.
La tercera caída de la Legión albiceleste fue la del santiagueño Trungelliti quien perdió con el estadounidense MacKenzie McDonald (118°) por un doble 6-4 sobre el polvo de ladrillo parisino, que no lo tendrá en el cuadro principal luego de haberlo logrado en las ediciones de 2016, 2017 y 2018.
De todas formas, los tres jugadores tienen opciones de ingresar como perdedores afortunados si es que hay alguna baja de último momento en el cuadro principal, que ya tiene siete argentinos.
Ellos son Diego Schwartzman (10° y semifinalista en 2020), Federico Delbonis (52°), Guido Pella (59°), Federico Coria (96°), Juan Ignacio Londero (100°) y Facundo Bagnis (101°), que ingresaron directamente por ranking al cuadro principal, al igual que la rosarina Nadia Podoroska (42°), que también defiende las semifinales.