Carlos Tevez consideró esta noche que la expulsión del colombiano Jorman Campuzano cambió el curso del Superclásico y que hasta esa acción el elenco de la Ribera tenía "el partido controlado".

"Hasta la expulsión de Campu teníamos el trámite controlado, trabajamos bien el partido, pero con uno menos se hace difícil", sostuvo Tevez sobre la prematura tarjeta roja para el volante "cafetero", a los 12 minutos del complemento.

En tanto, el "Apache" afirmó que cuando Boca "está concentrado y en buen nivel físico, con todos corriendo y metiendo, es muy difícil ganarle".

"No podemos bajar la intensidad, estamos en un momento justo en el que podemos hacer historia", dijo "Carlitos" al referirse a las posibilidades que el conjunto de la Ribera tiene tanto en la Copa Libertadores como en la Copa Diego Armando Maradona.

Por otro lado, el capitán boquense expresó sus ganas de seguir jugando al fútbol profesional: "El hincha de Boca tiene Tevez para rato, no pienso dejar, me siento bien y cómodo".

Por su parte, el defensor Carlos Izquierdoz, quien hoy lució la cinta de capitán, ya que Tevez ingresó en el segundo tiempo, reconoció que River tuvo "la iniciativa y la pelota", aunque opinó que "la posesión de la pelota es relativa, porque sino generás peligro, no sirve de nada".

"Nosotros no sufríamos, era una posesión que teníamos controlada, después con uno menos fue otra cosa", aseguró.

Finalmente, el ex zaguero de Lanús destacó el "amor propio" de Boca para ir a buscar el empate tras la expulsión de Enzo Pérez, a los 34 minutos del segundo tiempo.

"Con la expulsión de Pérez ellos perdieron el control del partido y viendo cómo se presentó el trámite, creo que el resultado fue justo", concluyó "Cali".