Los argentinos comenzaron el Abierto de Australia con el pie izquierdo. Es que de ocho participantes, solo Diego Schwartzman y Sebastián Báez pudieron avanzar a la segunda ronda.

El Peque comenzó su participación con un sólido triunfo ante el serbio Filip Krajinovic, por 6-3, 6-4 y 7-5, aunque unos fuertes dolores en la pierna derecha hicieron que se impusiera el suspenso en el final del partido.

Sebastián Báez confirmó los buenos resultados obtenidos a nivel Challenger y principalmente en el Next Gen Finals. En la primera rueda, y en el que significó su debut absoluto en Grand Slams, el joven de 21 años superó al experimentado español Albert Ramos Viñolas en 5 sets.

A partir de las 21, Schwartzman jugará frente al australiano Christopher O'Connell, quien ingresó al torneo gracias a una invitación de la organización. El ganador irá en tercera ronda contra el checo Thomas Machac y el estadounidense Maxime Cressy.

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Báez, por su parte, no la tendrá nada fácil en su encuentro que será cerca de la medianoche, ya que su próximo rival será el griego Stefanos Tsitsipas, número cuatro del mundo y uno de los grandes aspirantes al título. Además, el europeo despejó las dudas que había en relación a una posible lesión en uno de sus hombros, tras mostrar un gran nivel para superar al sueco Mikael Ymer por 6-2, 6-4 y 6-3. Aquel que gane se deberá ver las caras contra el vencedor del partido entre el búlgaro Grigor Dimitrov y el francés Benoit Paire.

Pero la actividad para esta nueva jornada del Abierto de Australia no termina ahí. A las 21, el campeón del US Open 2014, Marin Cilic, enfrentará a Gombos, mientras que también jugarán Andrey Rublev (5° preclasificado), Felix Auger Aliassime, Jannik Sinner, Andy Murray (cinco veces finalista del torneo) y el ruso Daniil Medvedev, quien se encuentra en la segunda posición del ránking y podría quitarle el número 1 a Novak Djokovic en caso de salir campeón.