El presidente de San Lorenzo de Almagro, Marcelo Moretti, podría pedir licencia en el cargo por tiempo indeterminado en medio de la crisis económica, institucional y deportiva que atraviesa el ´Ciclón´.

Sin lugar a dudas, el primer año de Moretti como presidente de los de Boedo fue catastrófico deportivamente, institucionalmente y económicamente. El pasado viernes, en el último partido del año ante Tigre, los socios irrumpieron en la asamblea ordinaria en la que se iba a debatir el balance 2023/24, suspendieron el acto y, tras la derrota ante los de Victoria, silbaron al equipo e insultaron al mandamás del ´Ciclón´.

La relación de los hinchas de San Lorenzo con Moretti es sumamente tensa y sin retorno, mucho más aún de que haya declarado la semana pasada que el club está en una situación “casi terminal” y de que se haya dado a conocer que la comisión directiva iba a vender a Agustín Hausch y Santiago Sosa a Defensa y Justicia por un monto muy bajo con el fin de hacerle frente a las deudas.

Con otras situaciones lamentables como la engorrosa deuda con el plantel profesional y la posible renuncia del entrenador Miguel Ángel Russo si no se solucionaba esa morosidad, desde la comisión directiva le sugirieron a Moretti que se tome licencia por un tiempo indeterminado y que se aleje del cargo para descomprimir la relación con los hinchas.

Ahora, la decisión quedará en manos de quién es presidente de San Lorenzo desde hace poco menos de un año. De aceptar el consejo y dar un paso al costado, quién tomará las riendas del ´Ciclón´ será Néstor Navarro, actual vicepresidente del club.