En la Argentina se encuentra la cancha donde se realiza el torneo de rugby más austral del mundo: está emplazada en el medio de la naturaleza, rodeada por nieve y montañas que le otorgan un paisaje espectacular en una geografía rústica como lo es la de la provincia de Tierra del Fuego. 

Se trata de la cancha de Ushuaia Rugby Club, una institución que se fundó en 1981 y fue precursora del deporte en una ciudad que por ese entonces apenas superaba los 10 mil habitantes y era la meca de muchos trabajadores del país, que llegaban hasta la ciudad desde varias provincias argentinas en busca de mejores salarios y condiciones laborales.  

El primer presiente de Ushuaia Rugby Club fue Luis López Dantas y afrontó el desafío -junto a varios compañeros entusiastas de la Comisión directiva- de construir la primera cancha de rugby en Ushuaia, un sueño que se terminó cristalizando en 1987 cuando se creó el campo de juego en una zona aledaña al Río Pipo que está rodeada de un paisaje espectacular que combina montañas nevadas, bosques y que está de camino hacia el Parque Nacional Tierra del Fuego. 

Una vista aérea de la cancha de Ushuaia Rugby Club, rodeada de montañas y ubicada a la vera del Río Pipo. Foto: Agencia Noticias Argentinas / MZL Deportes

“Cuando yo llegué a Ushuaia desde Córdoba en 1984 me encontré con el Ushuaia Rugby Club que ya estaba existiendo y con un grupo incipiente de muchachos que estaba dando sus primeros pasos en el deporte, así que me acoplé con ellos. En 1987 pusimos las primeras haches y realizamos el primer Seven del Fin del Mundo, que ya va por su 37° edición”, cuenta Cali Ríos ex jugador de Ushuaia Rugby Club y organizador del Seven del Fin del Mundo. 

La ubicación de la cancha del Ushuaia Rugby Club está en un lugar privilegiado debido a su belleza, pero también implica un desafío logístico debido a que las condiciones de Ushuaia para jugar al rugby son complicadas ya que hay vientos fuertes, bajas temperaturas y nieve durante gran parte del año, lo que provoca que la cancha únicamente pueda ser utilizada entre octubre y mayo. 

La cancha del Ushuaia Rugby Club en sus comienzos era muy áspera y no contaba con mucho pasto, ni tampoco las instalaciones que tiene actualmente. “Me acuerdo que entre varios jugadores nos pusimos a sacar piedras del campo de juego y que también colocamos champas de pasto para mejorar el terreno. Fue todo un trabajo a pulmón que se realizó con mucho esfuerzo”, rememora Cali Ríos. 

Seven del Fin del Mundo, el torneo de rugby más austral del planeta 

Un partido en la cancha de Ushuaia Rugby Club, disputado en la 37° edición del Seven del Fin del Mundo. Foto: Agencia Noticias Argentinas

Hoy la cancha de Ushuaia Rugby Club tiene una capacidad para 3 mil espectadores y cuenta con vestuarios, una cafetería, quinchos y un gimnasio aledaño, además de una cabina de transmisión y un SUM en el que se realizan actividades sociales.

En esta cancha se realiza el tradicional Seven del Fin del Mundo, cuya primera edición se disputó en 1987: este torneo fue  declarado de interés municipal y provincial y varios jugadores argentinos de renombre que han vestido la camiseta de Los Pumas lo han disputado. Entre ellos: Marcelo LoffredaEliseo BrancaAgustín PichotGastón Revol, Horacio Agulla Santiago Gómez Cora, actual entrenador de Los Pumas 7´s

Un asiduo habitué es el ex árbitro de rugby argentino Efraim Sklar -quien dirigió los Mundiales de Rugby XV disputados en Inglaterra 1991 y Sudáfrica 1995- y en la edición 2024 del Seven del Fin del Mundo es el presidente de la Mesa Fiscalizadora. 

Hablar del Seven del Fin del Mundo es hablar de los valores del rugby, porque ahí se aunan el esfuerzo, la voluntad, el sacrificio y también obviamente la satisfacción de poder disfrutar de este deporte. La primera vez que fui a este seven fue en la segunda edición a intervenir: creo que tuvo las peores condiciones meteorológicas desde que voy: hubo frío, lluvia, nieve, pero la verdad que me divertí y me asombré del esfuerzo que hacía toda esta gente, con Cali Ríos a la cabeza, para poder divertirse en este deporte en las peores condiciones que uno puede imaginar”.