Recuerdos de Humberto Maschio: Un ícono del deporte argentino
La leyenda de la Academia falleció a sus 91 años.
El ex integrante de Racing Club de Avellaneda Humberto Maschio falleció a sus 91 años, hace una semana estaba internado por un accidente doméstico.
Racing e Independiente se encargaron de difundir la noticia en sus redes sociales. Los lugares más especiales del referente argentino.
“Con profundo dolor comunicamos el fallecimiento de Humberto Maschio, campeón con nuestra camiseta del fútbol argentino, de América y del Mundo. Los que dejan huella jamás quedan en el olvido... ¡Siempre estarás en nuestro corazón, querido Bocha!", expresó Racing Club en su mensaje de despedida.
El Rojo escribió: “Respetado por todo Avellaneda, enviamos un saludo a todos sus amigos, familiares y seres queridos en este momento. Que en paz descanses, Bocha”.
El legado Maschio
Nació 10 de febrero de 1933 en Avellaneda. Sus primeros pasos dentro del campo de juego fueron dados en el Club Atlético Arsenal de Llavallol, en donde comenzó a desarrollar su talento como delantero.
Llegó a Quilmes Atlético Club, en donde logró explotar todo su potencial y despertó el interés de un gigante del fútbol argentino, Racing Club.
En 1954, fue el debut oficial con la camiseta celeste y blanca de Avellaneda. En el encuentro frente a Chacarita.
Un año más tarde, fue el goleador del elenco de la Provincia de Buenos Aires con 18 tantos. Luego de demostrar su capacidad para anotar, fue convocado para jugar Panamericanos de México con la Selección Argentina. En donde la selección nacional alzó el trofeo de campeón.
Integró la mejor delantera nacional de aquel entonces, con Corbatta, Angelillo y Sivori como figuras. Un equipo plagado de estrellas que logró quedarse con la Copa América de 1957, tras aplastar 3-0 a Brasil.
En 1967, formó parte del mejor plantel de la historia de la Academia. El glorioso “equipo de José” que se consagró campeón de la Copa Libertadores de América y la Copa Intercontinental (frente a Celtic).
Además, no solo triunfó con las medias bajas y los botines. En su etapa como director técnico de Independiente, en la vereda de enfrente, ganó la Copa Libertadores de 1973. Lo que lo llevó a entrar en la mejor era deportiva del Rojo.