Pablo Prigioni, entrenador de la Selección Argentina de Básquet, que se consagró campeón de la AmeriCup frente a Brasil, se refirió al sentido de pertenencia y rechazó la posibilidad de nacionalizar jugadores al asegurar que prefiere "perder con nuestra gente".

"Mientras yo esté en la selección, no habrá nacionalizados. Ni siquiera un integrante del staff de otro país. Prefiero perder con gente nuestra que intentar ganar con una persona que no sea Argentina", aseguró Prigioni en diálogo con Básquet Plus.

LEE: Todo lo que tenés que saber del Mundial de Qatar, a dos meses del comienzo

"Para mí la Selección es lo más puro que hay y ya que tenemos nuestras competencias de clubes para competir con gente de todo el mundo y me parece fantástico. No estoy en contra de quienes lo hacen, sino de la regla. No creo que Lorenzo Brown sienta la camiseta española como Sergio Llull o Rudy Fernández. Ahí se acaba la discusión", remarcó el entrenador de 45 años sobre los nacionalizados.

Además, el asistente de los Minnesota en la NBA explicó como se dio su llegada para ser el entrenador de la Selección argentina: "Recibí un fuerte apoyo de la Confederación, de Gonzalo (García), de Leo (Gutiérrez), cuando hablé con ellos, de mi familia, de los jugadores del equipo y de los Timberwolves, que era clave que ellos me autorizaran".

Prigioni y el sentido de pertenencia: "Prefiero perder con nuestra gente, que ganar con una persona que no sea argentina"

LEE: El estremecedor audio del piloto que trasladaba a Emiliano Sala: "Este avión tiene que volver al hangar"

"Fue realmente un fuerte empujón el que ellos me dieron, diciéndome que para la franquicia era un orgullo que yo pudiera representar a la institución en competencias internacionales siendo el seleccionador de mi país. Eso fue determinante", destacó.

Por último, Prigioni fue consultado por qué estilo quiere darle al básquet de la Selección y el entrenador señaló: "Estamos a una semana recién de Brasil y muchas cosas acá en Minneapolis, pero en el tema juego un poco lo que hicimos en Brasil, pero con más tiempo de trabajo y más enfocados en lo que puedan ser algunos equipos europeos que nos toque enfrentar. En líneas generales, lo que se vio en Recife, pero a la mejor versión posible".