LaLiga de España salió este domingo a respaldar al Barcelona en medio del conflicto con el futbolista argentino Lionel Messi, a quien no le dará la baja federativa salvo acuerdo entre las partes o pago de la cláusula de rescisión del contrato, valuada en 700 millones de euros.

En un comunicado oficial, el ente que regula los torneos profesionales de fútbol en España salió al cruce "de las diferentes interpretaciones (algunas de ellas contradictorias entre sí) publicadas en los últimos días en distintos medios de comunicación, relacionadas con la situación contractual de Messi con el Barcelona".

En ese sentido, explicó que LaLiga analizó el contrato del rosarino de 33 años y determinó que está "actualmente vigente" con el Barcelona.

"En cumplimiento de la normativa aplicable, y siguiendo el proceder que corresponde en estos supuestos, LaLiga no efectuará el trámite de visado previo de baja federativa al jugador si no ha abonado previamente el importe de dicha cláusula", anunció el organismo presidido por Javier Tebas.

De su lado, Messi confirmó este domingo su intención de irse del Barcelona de España luego de 20 años al no presentarse, junto al resto del plantel, a realizarse los hisopados PCR de coronavirus de cara al inicio de la pretemporada, mientras que el presidente culé Josep María Bartomeu espera reunirse esta semana con Jorge, padre y representante del rosarino.

Este nuevo paso de la "Pulga" de no presentarse en la Ciutat Deportiva "Joan Gamper" fue comunicado a la directiva culé a través de otro burofax, según dio cuenta la radio catalana "RAC 1" este sábado.

La comunicación llevaría la firma de Jorge Messi, padre y representante de la "Pulga", quien se encuentra en Rosario y viajaría en las próximas horas a Barcelona.

Ese viaje es muy esperado por el presidente Bartomeu, quien permaneció en contacto con Jorge Messi, luego de que el martes llegó el burofax que causó un cimbronazo en el mundo fútbol, donde el delantero argentino de 33 años pidió ajustarse a una de las cláusulas de su contrato, que le permitía salir en libertad de acción antes del inicio del último año.

El presidente del conjunto catalán está dispuesto a verse con él, aún sabiendo que las posturas de ambos son sumamente distantes en este punto de la negociación.

Bartomeu no quiere un traspaso ni una salida de Messi, de hecho filtró en diferentes medios de la ciudad española que pondría su renuncia a disposición si eso provoca la continuidad del crack rosarino.

"Acepta el mal momento y la bronca de Messi tras la vergonzosa eliminación de la Liga de Campeones frente al Bayern Munich por 8-2, pero quiere que recapacite y no se plantea venderlo porque es patrimonio del club y no quiere perderlo", publicó el diario "Mundo Deportivo".