El fútbol español y particularmente Barcelona se revolucionó hoy luego de que diferentes medios de ese país se hicieron eco de la reunión cara a cara que Lionel Messi tuvo con el flamante entrenador culé Ronald Koeman, donde el futbolista argentino le habría comunicado que se ve "más afuera que adentro" del proyecto.

El cimbronazo del 2-8 ante Bayern Munich de Alemania por los cuartos de final de la Liga de Campeones seguirá de esta manera movimiento los cimientos de uno de los clubes más importantes del mundo, que provocó la salida del entrenador Enrique Setién y el secretario deportivo Eric Abidal, en los últimos días.

Este jueves, el capitán catalán frenó las vacaciones con su familia y aceptó el pedido de entrevista que le hizo el técnico holandés.

"Messi comunica a Koeman que no ve claro el futuro en el Barsa", informó RAC1, una de las radios más escuchadas en la región de Cataluña.

De todas formas, todos coinciden en asegurar que la posible salida de Messi del Barcelona, donde jugó toda su carrera, no sería sencilla desde lo contractual.

El delantero rosarino, de 33 años, arrastra, más allá de los golpes deportivos recientes, diferencias con la directiva encabezada por el presidente Josep María Bartomeu, por fomentar campañas de desprestigio hacia algunos de sus futbolistas a través de las redes sociales.

A eso se le suma que históricos del plantel que supo dominar el mundo del fútbol durante varios años podrían emigrar como el defensor Gerard Piqué, el mediocampista Sergio Busquets y el delantero uruguayo Luis Suárez, el mejor amigo de Messi dentro del plantel.

Por su lado, Koeman expuso su proyecto, donde como manifestó públicamente, Messi es una piedra fundamental, por lo que espera convencerlo para que sea el líder de su equipo.

El holandés asistió al encuentro tras estar trabajando en la Ciutat Esportiva, mientras que Messi se encontraba de vacaciones en la ciudad de Cerdaña y se habría vuelto por ruta en automóvil para asistir a la cita.