Historieta brava
Lo comentó La Sal del Deporte en su edición de la semana anterior, la última de 2019. Tuvo inmediata continuidad y repercusión.
El informante Bailarín Tamborilero, siempre atento a las noticias que circulan por el corredor olímpico, contaba que el
hermano de Román se quería acercar a la barra brava del club de la ribera.
Donde mandan desde hace ya tiempo Mauro y Rafa.
En las últimas horas, Infobae.com se extendió en el tema.
Que tuvo continuidad esta semana.
Cuenta el periodista Gustavo Grabia que cuando la conferencia de prensa de Miguel Angel Russo había terminado, comenzaron a ingresar al club integrantes del grupo de choque conocido como "El Jugador Número Doce".
Que lo hacían de a cinco primero, para pasar luego a entrar en grupos más grandes, hasta llegar a pelotones de 50.
Encabezados por Rafa y Mauro.
Relata que se hicieron ver ese día y en ese horario conscientes de que muchas filiales festejan allí el fin de año y
así, su presencia tendría la repercusión que procuraban.
Esta historia confirma que a "la cabeza" de la barra no la quiere la nueva gestión.
El grupo de choque respondió al anterior presidente, confirma el artículo en cuestión. Y jugó en la elección para el casi
ignoto candidato oficialista, buen muchacho de Flores Sud.
También recuerda Infobae.com que la relación del ahora dirigente Román con los elementos que ocupan habitualmente la
segunda bandeja de la tribuna que da espaldas a Casa Amarilla se rompió definitivamente en abril de 2010.
En aquella oportunidad, los sujetos de los paravalanchas fueron a un entrenamiento y trataron mal a Javier García, quien
había tenido un altercado con el entrenador de entonces, Abel Alves.
Como están las cosas, Rafa es el espantoso rostro visible del grupo en los últimos tiempos, pero "el teléfono rojo y las
vituallas venían al pie de Mauro", subraya el informe.
Incluso el primero, el día de la elección forzó su entrada al búnker opositor y logró mostrarse cerca del candidato que
después ganaría la elección.
Pero el intento de la barra por acercarse ese mismo día a Román fue infructuoso.
Ahora, los popes del grupo estarían temerosos de algún posible operativo retorno de los "disidentes" encabezados por
Christian De Vaux y Maximiliano Mazzaro.