Final brasileña de la Copa Libertadores: Palmeiras-Santos
Jugarán en el estadio Maracaná. A las 17:00 se producirá este hecho que se da por primera vez en 15 años.
Santos y Palmeiras definen este sábado en el estadio "Maracaná" de Río de Janeiro la final brasileña de la Copa Libertadores, hecho que se da por primera vez en 15 años, con el título de campeón en juego y el pasaje al Mundial de Clubes, en dos semanas.
El encuentro, la definición número 61 del máximo torneo continental de clubes, se jugará a partir de las 17:00 (hora argentina), en caso de empate habrá alargue y, de persistir, penales.
Pese a que no hay futbolistas argentinos en los dos planteles, la representación estará en la convocatoria arbitral: el principal será Patricio Loustau acompañado por Ezequiel Brailovsky y Diego Bonfá como asistentes; más Darío Herrera y Julio Fernández como auxiliares.
En el VAR, además, estará como principal Mauro Vigliano, acompañado por el colombiano Jhon A. Ospina y los argentinos Juan Pablo Belatti y Fernando Rapallini.
En lo económico, el ganador embolsará 12 millones de dólares y otros 3 más por asegurarse un lugar en la fase de grupos de
la edición 2021.
La clasificación a la Recopa Sudamericana, que definirá en marzo con Defensa y Justicia -campeón de la Sudamericana-, le agregará 2 millones de dólares más.
En lo deportivo, hace 15 años, con el duelo entre el Inter de Porto Alegre y San Pablo, que dos brasileños no definían la Copa Libertadores, con el condimento de que en esta edición, Santos y Palmeiras eliminaron a Boca y River, respectivamente, en semifinales.
El "Verdao" ratificó su candidatura desde un inicio, con una fase de grupos casi perfecta donde ganó su zona con cinco victorias y un empate, ante Guaraní de Paraguay, Bolívar de Bolivia y Tigre.
El sorteo de octavos lo favoreció, ya que tuvo la suerte de medirse con Delfín, uno de los peores segundos de la fase de grupos, y lo terminó aplastando, con un 3 a 1 en Ecuador y un 5 a 0 contundente en Brasil.
Luego, en cuartos, se cruzó con Libertad, el otro peor segundo de los grupos que dejó a Jorge Wilstermann en el camino: fue 1-1 en Asunción y un 3 a 0 en San Pablo.
En el cruce con River, en tanto, aprovechó el sorpresivo 3-0 como visitante en Avellaneda y, si bien sufrió hasta el final en casa, defendió el 0-2 que lo metió en la final por un título que solo ganó una vez (en 1999, ante Deportivo Cali de Colombia).
De su lado, el "Peixe" -tres veces campeón de la Libertadores en 1962, 1963 y 2011- también tuvo un camino arrollador desde el inicio.
En el grupo G terminó como ganador e invicto tras superar a Defensa y Justicia -flamante campeón de la Copa Sudamericana-, Delfín de Ecuador y Olimpia de Paraguay.
El sorteo lo cruzó con la Liga de Quito en octavos, al que superó ajustadamente, luego enfrentó una dura serie con Gremio, que resolvió tranquilamente con un 1 a 1 de visitante y una goleada 4 a 1 en su casa.
En la semi contra Boca, aguantó el 0-0 en La Bombonera y en San Pablo lo pasó por arriba con 3 a 0 que lo metió en su primera final desde 2003, cuando justamente perdió ante el "Xeneize".