La última vez que se vio a Roger Federer dentro de una cancha de tenis fue el 7 de julio del 2021, cuando cayó en tres sets contra el polaco Hubert Hurkacz por los cuartos de final de Wimbledon. Tras más de un año de inactividad, el regreso de Su Majestad al circuito se daría en su ciudad de nacimiento, aunque  ya había confirmado su presencia en la Laver Cup, que se disputa en septiembre y no forma parte del calendario ATP.

Luego del torneo en la Catedral del Tenis, el futuro de uno de los mejores tenistas de la historia se convirtió en una incógnita por los problemas que arrastraba en la rodilla. Tras la caída con Hurkacz, Federer anunció que debía operarse una de sus rodillas: “Quiero estar sano y pasar por este proceso con el objetivo de seguir en actividad me ayudará durante este tiempo”, explicó tras confirmar que la recuperación le llevaría varios meses.

Este martes se comenzó a ver luz al final del túnel en lo que respecta al regreso de Federer en el circuito ATP. Es que la cuenta oficial del torneo de Basilea confirmó su presencia: “El 10 veces campeón individual y héroe de la ciudad natal Roger Federer ha anunciado su regreso al estadio St. Jakobshalle”, mientras que el suizo se encargó de compartir la publicación acompañado del mensaje “deseando volver a casa”.

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Será cuestión de tiempo para ver si el suizo, ganador de 20 torneos de Grand Slams, anuncia su participación en algún torneo previo y qué decide hacer de cara a su futuro como profesional en la temporada 2023.