Diego Molina, uno de los empleados de la funeraria que se fotografió junto al cuerpo de Diego Maradona, se entregó en una comisaría porteña, aunque no quedó detenido.

El hombre, cuya imagen se viralizó y era buscado por la Justicia, se presentó en horas de la noche del pasado viernes en la Comisaría Vecinal 15 A, en donde se le tomaron los datos personales y se le comunicó de la situación en que se encuentra por la violación al artículo 70 del Código Contravencional.

De acuerdo a lo dispuesto por la norma porteña, "inhumar, exhumar o profanar cadáveres humanos, violar sepulcros, dispersar cenizas se sanciona con 400 a 4.000 pesos de multa o 2 a 10 días de arresto".

La imagen de Molina junto al féretro en el que se encontraba el cuerpo de Maradona fue rápidamente viralizada y el propio abogado del 10, Matías Morla, difundió datos del empleado.

"Diego Molina es el canalla que se sacó una foto junto al féretro de Diego Maradona. Por la memoria de mi amigo no voy a descansar hasta que pague semejante aberración", indicó el letrado en Twitter.