Tras su exitoso e histórico paso por Colón de Santa Fe, Eduardo Domínguez arribó a Independiente con el objetivo de plasmar su idea de juego y ubicar nuevamente al equipo de Avellaneda en lo más alto del fútbol argentino.

Pero las cosas, por lo menos en estos primeros meses del 2022, no le salieron como esperaba al director técnico, que actualmente camina sobre la cuerda floja. Es que pese a haber sumado dos importantes triunfos en la Sudamericana y estar con buenas posibilidades de avanzar a octavos de final en el torneo continental, los resultados en la Copa de la Liga no acompañan para nada.

Actualmente, Independiente se encuentra en la 13° colocación del grupo B de la Copa de la Liga, con solo 2 triunfos, 7 empates y 4 derrotas. Por eso, la continuidad Domínguez como técnico del Rojo es una incógnita y él mismo se encargó de reconocerlo tras la derrota de ayer frente a Lanús.

LEER MÁS: River fue una máquina, goleó a Sarmiento 7 a 0 y se clasificó a los cuartos de final

“Habrá que ver si están de acuerdo con lo que nosotros creemos para lograr una mejora”, detalló el técnico al contar que se sentará a hablar con los dirigentes.

De todas maneras, subrayó que “por ahora solo se piensa en los próximos dos partidos… No es momento de tomar decisiones apresuradas. Hay que planificar lo que viene, pero con tranquilidad”.

Por otra parte, reconoció que “estamos en un camino difícil, pero tenemos que ganar en Paraguay y cerrar ante nuestra gente con un triunfo contra Huracán. Estos puntos tal vez los necesitemos más adelante”, refiriéndose a la posibilidad de pelear por ingresar a las copas internacionales del año que viene.

Este martes, Independiente visitará a las 21:30 a General Caballera, de Paraguay, por la cuarta fecha de la fase de grupos de la Copa Sudamericana y sentenció: “Hay que trabajar en lo futbolístico, en lo físico y en lo psicológico”, cerró.